El dólar se fortaleció frente al euro y la libra después de las declaraciones de un miembro de la Reserva Federal, que subrayó que el banco central estadounidense no tiene intención de bajar urgentemente los tipos de interés.
Mientras tanto, el mercado se prepara para recibir importantes datos de inflación en Estados Unidos y se abstiene de tomar decisiones respecto al yen por temor a una intervención de las autoridades japonesas.
Alrededor de las 10.15 horas, el yen se mantenía estable en 151,46 frente al dólar, después de haber alcanzado ayer su nivel más bajo desde 1990 en 152, antes de que los líderes de la política monetaria japonesa sugirieran la posibilidad de intervenir para evitar nuevas caídas.
El euro perdió un 0,45% hasta 1,0779 dólares, marcando un mínimo de cinco semanas, mientras que la libra cayó un 0,4% hasta 1,2587 dólares.
El índice dólar subió un 0,32% hasta 104,685, alcanzando su nivel más alto desde mediados de febrero.
Las expectativas de un primer recorte de tipos por parte de la Reserva Federal en junio se han moderado ligeramente. Según FedWatch, la probabilidad actual es del 60%, frente al 67% de la semana anterior.
Si los datos de inflación sorprenden al alza y respaldan al dólar, el efecto más significativo podría afectar al yen. Los operadores creen que el nivel 152 podría activar opciones, acelerando la devaluación de la moneda japonesa.
