Inmaculada, explicación del final del horror religioso con Sydney Sweeney

Inmaculada, explicación del final del horror religioso con Sydney Sweeney
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Sydney Sweeney quiso superar todos los límites en Immaculate, la nueva película de terror dirigida por Michael Mohan. La película desempolva el mito de la Virgen María, con un significado completamente oscuro.

La clasificación R de Inmaculada ya anticipa los tonos extremos de la película, dispuesta a atraer al público reproponiendo la clásica lucha entre el bien y el mal con un horror de carácter religioso. Sydney Sweeney es la hermana Cecilia, una joven religiosa que inexplicablemente queda embarazada (la niña es virgen): lo suyo es un milagro, pero apenas se anuncia el embarazo, hechos inquietantes comienzan a suceder a su alrededor. Entonces, ¿cómo termina Inmaculada?

La película aún no se ha estrenado en Italia, ¡así que cuidado con los spoilers!

El embarazo de sor Cecilia no es fruto de un don de Dios, sino de un extraño experimento realizado por el padre Tedeschi para crear un nuevo “Jesús”, que esconde un extraño laboratorio en el sótano del convento. El descubrimiento conmociona a la joven: si el niño nacido fuera realmente un nuevo Mesías, el futuro para ella sería incierto y aterrador. El miedo a ser asesinada empuja a la hermana Cecilia a quemar todo el laboratorio y quitarle la vida al padre Tedeschi, con la intención final de matar también al recién nacido.

Pero Inmaculada termina con un cliffhanger: justo en el momento en que la joven se dispone a aplastar al recién nacido con una pesada piedra, la pantalla se queda en negro dejando a la audiencia en duda si la hermana Cecilia realmente logró matar a una criatura inocente o si los sentimientos de culpa se apoderaron de ella. Sin embargo, un momento antes de que la monja recoja la piedra, se escucha una respiración entrecortada, probable indicio de que el recién nacido no es realmente un “bebé”.

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