En las columnas de la edición de hoy de Corriere dello Sport, Ivan Zazzaroni comentó sobre el partido de mañana entre Italia y Croacia: “Esto son charlas vacías. Es domingo, hace un calor increíble y la dispersión nos persigue justo cuando faltan pocas horas para que llegue la madre, o tal vez la tía, de todos los clasificados. para los octavos de final (…). Su fútbol es invariable, así que adelante con una Italia muy personal, muy influenciada por la actuación ante España que dijo mucho.
Escucho que se repite con creciente insistencia que Spalletti debería pasar a una defensa de tres hombres. Cosas obsoletas: ahora todos construyen 3 más 2 más 5 y defienden hombre a hombre. El problema ya no es el diseño, sino la actitud. ¿Cuatro o tres entonces? Respondo dos, pero así de grande. Y activo, muy activo.
Croacia es, como España, un equipo de armadores: Kovacic, Brozovic, Modric, Pasalic y el propio Sucic, en caso de que sustituya a alguno de los tres desde el inicio o durante el partido.
Las diferencias más notables entre las dos selecciones son las siguientes: los españoles son en promedio jóvenes, los croatas “mayores”, pero también tienen más experiencia y ciertamente son más lentos en la propuesta. Sin embargo, recuerdo que contra Fabián y compañía pelearon por la posesión. Además, los extremos de Dalic no son tan rápidos como Nico y Yamal”.
