Prueba de alcohol gratuita en Asti con Specchio dei Tempi

Massimiliano Peggio

¿Quieres probar una prueba de alcohol? Esta es una iniciativa educativa, no arriesgas nada.“. La invitación, a primera vista, casi suena a trampa, dada la presencia de la policía.

Esta noche no hay multas, sólo prevención.”, confirma el brigadier. Ángela sonríe, le entrega a su amiga el vaso con dos dedos de cóctel y acepta someterse a la prueba. “De todos modos, esta noche no conduciré”, dice.

Unos segundos después de la respuesta: una tasa de 1,88. El más alto de la noche. “Vaya, exageré un poco. Y pensar que me gustaría unirme a la policía. Pero te juro que no me siento borracho.”

Parada en Asti, en Piazza San Secondo, anteayer, para ver el laboratorio móvil de Fundación Espejo del Timesusado para difundir la campaña de prevención contra el abuso de alcohol Y detener el fenómeno de las masacres del sábado por la noche. El espíritu de la iniciativa, bautizado “Un respiro puede salvar tu vida“, nacido hace algún tiempo de la propuesta de un lector, es llevar a la vida nocturna los lugares de Turín y de la provincia, un mensaje positivo y no punitivo sobre los riesgos de conducir en estado de ebriedad.

Por qué “Un soplo te salva la vida”

Objetivo: sensibilizar sobre el consumo consciente de alcohol, planificar conductas preventivas. ¿Ejemplo? “Si salimos en grupo, uno de ellos no bebe, así que puede conducir”, dice Marco, de 22 años, mientras arrastra a sus amigos para hacer el examen. Uno de ellos golpea con decisión. Su tasa está por encima del límite legal: 0,53. “Si me hubieran parado, adiós a mi licencia”.

Colabora en el proyecto de la Fundación Specchio dei Tempi, que aporta personal sanitario y voluntarios. el mando de los Carabinieri de la Legión de Piamonte y Valle de Aosta. Además de realizar las pruebas, ofrecidas por la asociación de farmacéuticos Federfarma, se distribuyen kits de “hágalo usted mismo”. El sábado, durante cuatro horas en la plaza de Asti, se realizaron 80 pruebas.

En su mayoría se presentaron en el taller de autocaravanas de Autobús espejo personas entre 24 y 40 años. Pero también los pensionistas. “Me bebí tres mojitos, ¿quién sabe qué precio me darán?” dice la señora Graziella. Al cabo de unos instantes sale radiante con el resultado: “Tengo 0,3, puedo conducir”, dice mirando a su marido. Él asiente: “Es mejor hacer lo que ella dice”.

PREV OFICIAL, el Udinese ha comprado Lucca: contrato hasta 2028
NEXT Vuelve “Da Chiostro a Chiostro”, el festival enogastronómico de Prato