Teverola Futura en nombre del pasado, la Caserta meloniana apoyada por Barbato y Lusini

En lugar de Teverola Futura debería llamarse Teverola Passata. La lista del candidato a la alcaldía, Gennaro Caserta, parece mirar hacia atrás en lugar de mirar hacia el futuro. Entre los aspirantes a concejales destaca en primer lugar el nombre del alcalde saliente, Tommaso Barbato, expulsado a casa por manifiesta incapacidad política y administrativa. Pudo perder todas las piezas de la mayoría como un niño que hace pedazos un castillo de arena a patadas.

Una explosión del pasado representa también a los candidatos a las elecciones que orbitan en la zona de Biagio Lusini, que detrás de escena apoyan a Caserta, otrora malvado absoluto hasta el punto de crear el “Comité sin voto” para impedirle siendo elegido cuando se postuló solo. Mencionamos a Vincenzo Brunzo, Sara Pellegrino, Pasquale De Floris, Luciano Orabona y Ellen Di Martino. Las candidaturas de Crescenzo Salve y Michele Cipriano también son un poco antiguas: en 2019 compiten con Barbato, pero en los 15 años anteriores siempre junto a Lusini. Hoy todos se unen apasionadamente. El más “viejo” de todos es el propio Gennaro Caserta, el “montañoso” de la política local pero sin el encanto de Christopher Lambert. Por Dios, no somos amantes del “newismo”. Pero ofrecer a los votantes bienes de segunda mano garantizados (y ni siquiera tanto) no es exactamente lo mejor para una ciudad que necesita un soplo de aire fresco. Otro punto débil de la coalición de Caserta es la contradicción política en su seno. La aspirante a banda tricolor forma parte del ejecutivo provincial de Fratelli d’Italia (foto abajo).

Nada malo, por supuesto. Lo vemos sonriendo en una foto junto a Giorgia Meloni. Excepto que Lusini y muchos de sus hombres no tienen nada que ver con el mundo de la derecha. Teverola es una gran ciudad. Una bisagra fundamental para una parte de la zona de Agro Aversa. No se puede considerar lo mismo que un pequeño pueblo. Las contradicciones políticas se harán sentir. Y seguramente tendrán repercusiones negativas en la administración municipal. Incluso a nivel programático, la propuesta de Caserta parece débil. Sin proyectos de propaganda fantasmagóricos, la continuidad con la experiencia administrativa pasada es un enorme obstáculo. No está claro, por ejemplo, por qué debería tener éxito donde el ex alcalde fracasó. Además, en caso de elecciones, nadie querría estar en el lugar de Caserta, atrapado entre Barbato y Lusini. Hay muchos ingredientes para discutir cada dos días, en aras de la estabilidad político-administrativa. Por eso la lista Teverola Futura debería llamarse Teverola Passata. Hay muy pocas novedades. Un minuto después del recuento electoral, surgirán las mismas viejas historias. Caserta querrá gobernar a su manera, Lusini también y Barbato igualmente. Un regreso al pasado que Teverola no puede permitir. Pero evidentemente los días 8 y 9 de junio serán los electores quienes decidirán el destino de las ciudades.

mario de michele

EL EJECUTIVO PROVINCIAL DE CASERTA DE FRATELLI D’ITALIA

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