“Sin fuego no se puede ir a ninguna parte”

Al día siguiente es aún peor. Es el de la conciencia, el de las cuentas, tras el fracaso total en el campo de Vis Pesaro. El Perugia se complica la vida de cara al final, pero la derrota del domingo no es casualidad, es la quinta en los últimos seis partidos fuera de casa, con sólo un gol marcado en esta larga serie de partidos. Tanto es así que a los rivales (a excepción de Chiavari) les bastaba con marcar un solo gol para llevarse siempre a casa todo el botín.

El resbalón cierra las puertas a la tercera posición (ahora a cinco puntos), pero sobre todo pone en riesgo la posición del mejor cuarto, ahora ocupada por Triestina que tiene un punto más, mientras que Casertana tiene un punto menos que Grifo. Y el mejor cuarto tiene ventajas que podrían haber valido grandes motivaciones. Formisano no oculta su profunda amargura: “Es decepcionante porque hicimos una actuación muy mala, no a la altura de lo que teníamos que hacer. No a la altura de las motivaciones de un rival que desde este punto de vista lo dio todo más que nosotros”. que más allá de los aspectos técnico-tácticos lo que importaba eran las motivaciones. Faltaba fuego, los chicos no lo tenían. Esto me duele porque trabajamos todos los días para intentar que la gente entienda cuánto cuenta cada balón. Los muchachos no lo entendieron, las motivaciones del rival no deberían haber superado las nuestras. Tenemos que trabajar en esto de cara a los playoffs”.

Arezzo en casa y Cesena fuera: dos partidos difíciles que deberán aportar el máximo de puntos a las arcas del Perugia para intentar contrarrestar el “retorno” del Triestina, que se encontraba a dos puntos de distancia antes de la última jornada. El actual cuarto mejor del C tendrá que lidiar, en los dos últimos partidos, con Padua, segundo y en el papel sin goles hasta el play off, y con Novara, que en cambio busca puntos de supervivencia.

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