San Pedro – Sicilianos
Evite exhibir o utilizar obras de arte de forma que pueda sugerir una actitud de “absolución o defensa sutil” de los presuntos abusadores o que pueda indicar “indiferencia ante el dolor y el sufrimiento de tantas víctimas de abusos”. Esta es la petición que el presidente de la Comisión Pontificia para la Protección de los Menores, el cardenal Sean O’Malley, dirigió a los departamentos de la Curia Romana en una carta enviada a los prefectos el miércoles. Así lo anunció en una nota publicada en el sitio web de la Comisión tutelaminorum.org.
Una atención necesaria, subraya el cardenal, ante “la angustia psicológica que tantos sufren” y que no puede dejar a nadie indiferente, afirmó el purpurado en la carta enviada en nombre de la Comisión a los responsables de la Curia el 26 de junio. En los últimos meses, añade la nota, las víctimas y supervivientes de abusos de poder, abusos espirituales y abusos sexuales han acudido a la Comisión “para expresar su creciente frustración y preocupación por el uso continuado de las obras de arte de Marko Rupnik por varias oficinas vaticanas”. Actualmente, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe está llevando a cabo una investigación sobre las acusaciones de abuso psicológico y sexual de varias mujeres consagradas por parte del padre Rupnik, quien fue expulsado de la Compañía de Jesús en junio de 2023. La presunción de inocencia hasta la condena, O’ Malley afirma además, deben ser respetados, pero la Santa Sede y sus oficinas deben, no obstante, “ejercer una sabia prudencia pastoral y compasión hacia aquellos que resultan perjudicados por el abuso sexual clerical”.
«El Papa Francisco nos instó a ser sensibles y a caminar en solidaridad con aquellos que son perjudicados por toda forma de abuso – subraya la carta de O’Malley -. Os pido que lo tengáis presente a la hora de elegir las imágenes que acompañarán la publicación de mensajes, artículos y reflexiones a través de los diversos canales de comunicación a nuestra disposición”, escribió el purpurado.
Mientras tanto, según informaron agencias de noticias, cinco víctimas, a través de la abogada Laura Sgrò, habrían enviado una carta a los obispos de las diócesis donde se encuentran las obras de Rupnik, quienes también solicitarían su remoción.
“Independientemente de cualquier procedimiento en curso contra el autor, e independientemente del resultado, lo que se pide es que prevalezcan razones de sentido común para no utilizar estos mosaicos en ambientes eclesiales, incluso independientemente de su valor artístico”, se lee en la carta. La exhibición de mosaicos en los lugares de culto es “inapropiada”, añade el abogado, y retraumatizante para las víctimas que “tienen que afrontar cada día las consecuencias psicológicas que los abusos les han causado”. Abusos que, según denuncia la carta, también se cometieron durante la realización de algunas de las obras.
