Al menos 14 peregrinos jordanos y cinco iraníes han muerto en Arabia Saudita durante la peregrinación anual Hajj, que se desarrolla bajo un calor abrasador. La peregrinación anual Hajj, uno de los cinco pilares del Islam, comenzó el viernes en La Meca con la participación de más de 1,8 millones de fieles, la mayoría procedentes del extranjero. Este año tiene lugar en pleno verano, en una de las regiones más calurosas del mundo, donde se espera que las temperaturas alcancen los 46 grados hoy.
Las autoridades sauditas no han proporcionado detalles sobre el número de casos de hipertermia observados entre los peregrinos, pero el año pasado se registraron más de 10.000, incluido un 10% de insolación, el caso más grave. “Catorce peregrinos jordanos murieron y otros 17 desaparecieron mientras realizaban los rituales del hajj”, anunció el Ministerio de Asuntos Exteriores jordano, según un comunicado publicado por la agencia oficial de noticias Petra. Los 14 peregrinos murieron “después de sufrir un golpe de calor”, añadió. “El ministerio está siguiendo con las autoridades saudíes pertinentes los procedimientos para enterrar a los peregrinos y transportar los cuerpos de aquellos cuyas familias desean que sean trasladados al reino”, dijo, añadiendo que la búsqueda de los 17 peregrinos desaparecidos continúa.
El jefe de la Media Luna Roja iraní, Pirhossein Koolivand, afirmó que “cinco peregrinos iraníes perdieron la vida (…) en La Meca y Medina durante el Hajj de este año”, sin precisar inmediatamente las circunstancias de sus muertes.
