Fue uno de los últimos intransigentes de la Camorra Casalese, custodio de importantes secretos, pero después de 26 años en prisión, la mayor parte transcurridos bajo el duro régimen penitenciario, Francesco Schiavone, conocido como Sandokánlíder indiscutible del clan casalesi, decidió colaborar con la justicia. Así lo informó la edición impresa del periódico “Cronache di Caserta”. En los últimos días, hasta donde sabemos, la policía se dirigió al Casal di Principe para proponer a los familiares del líder del clan, entre ellos a su hijo Ivahnoe, la entrada en el programa de protección, confirmando la voluntad de Sandokan de colaborar con la DDA de Nápoles. Schiavone sigue el camino ya recorrido por sus hijos Nicola (en prisión desde 2010, arrepentido desde 2018) y Walter (colaborador de la justicia desde 2021). El capo padece cáncer desde hace algunos años y recientemente fue trasladado a la prisión de L’Aquila. Es el segundo líder del clan Casalesi que se arrepiente después de Antonio Iovine, conocido como ‘o ninno, que empezó a hablar ante los jueces en 2014.
Schiavone cumple hoy 70 años. Junto con Francesco Bidognetti fundó el clan Casalesi y líder de la Camorra napolitana y de Caserta. Fue detenido el 11 de julio de 1998 en su búnker de Casal di Principe. Hace sólo dos meses, el jefe solicitó el juicio abreviado en el proceso que lo acusa de tres asesinatos, el de: Luigi Diana, Nicola Diana y Luigi Cantiello. Se trata del primer rito abreviado en la historia judicial de “Sandokan”, en el que famosos pasaron mucho tiempo en los tribunales gritando su inocencia. Y fue el propio Francesco Schiavone quien lo solicitó, pidiendo hablar vía videoconferencia con la sala del tribunal de Napo.
El alcalde de Casal di Principe, Renato Natale
“Estoy feliz por esto y espero que pueda arrojar luz sobre un período oscuro de nuestra historia, pero también ayudarnos a identificar aquellos rincones aún ocultos que podrían representar un peligro futuro para nuestra gente, para nuestra economía y nuestras instituciones”.
