El canto de los pájaros – Old Faithful :: Reseñas de OndaRock

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Las palabras se estrellaron contra la ventana mientras escribía esta canción.
Todavía hay vidrio en el suelo.
(“Old Faithful”)

A veces la realidad irrumpe así, como una piedra arrojada contra una ventana. Y las astillas quedan ahí para recordarnos que no, la verdadera coherencia de las cosas no es aquella que nos preocupa todos los días. Incluso los primeros versos de “Old Faithful” bastarían para decirlo todo: estas canciones son fragmentos de una intuición, momentos que de repente resuenan con algo más.
Sam Sodomsky escribe sobre música en Pitchfork (y algunas otras publicaciones), pero también escribe sus propias canciones, bajo el paraguas de The Bird Calls. Tiene a sus espaldas una larga serie de discos de producción propia, todos basados ​​en composiciones estrictamente de baja fidelidad; luego, en 2021, llegó el fichaje con el sello neoyorquino Ruination (el mismo que Adeline Hotel): desde entonces, “Old Faithful” es el cuarto álbum grabado por Sodomsky en un estudio real, y es también su trabajo más logrado hasta el momento. fecha – el punto de partida ideal para aventurarse en los pliegues de su poética.

Y no es que la vida sea corta
Pero que todo lo que nos rodea es tan vasto
Sesga la escala
Y el mejor consejo que nos dan es no mirar hacia abajo
(“Volviéndose loco”)

Tomemos como ejemplo “Going Insane”, con su arpegio tan frágil como ciertas páginas de Iron & Wine: la batería apenas es un carcaj, alrededor sólo hay la caricia de una voz femenina, el brillo de los teclados, los versos suspendidos. La realidad es un vértigo fuera de escala, como lo es el fondo de nuestro corazón. Y es un poco como encontrarse en casa, para aquellos que guardan un lugar especial para sí mismos. compositor de canciones Estadounidenses de finales de los 90 y principios de los 2000: las sombras de Bill Callahan se proyectan sobre la pista principalel espíritu áspero de Conor Oberst anima “Footprints”, las cabras montesas más pensativas se asoman entre los acordes ásperos de “Daisy Chain”.
Sodomsky, sin embargo, es también un férreo springteeniano (quién sabe hasta qué punto habrá desgastado los grooves de “Nebraska”…) y en “Pleasing Myself” juega a deconstruir con ironía el mito romántico de nacido para correr: “Rompe con tu novio y súbete a mi auto/ Ella dijo que así no es como tomo decisiones y no sé quién eres tú/ Pero en todas mis canciones favoritas/ Ya nos habríamos ido”. Jugar con los clásicos, para él, parece algo espontáneo, desde las citas de Dylan más o menos escondidas entre líneas de las canciones, hasta la (explícita ya desde el título) de “Sloop John B” en “Worst Trip”. Así, el country-folk (sólo aparentemente) despreocupado de “I Haven’t Been This Happy In A Long Time” reescribe el solo de Tom Petty al estilo agridulce de Justin Townes Earle, mientras que el ritmo de “I Wish That We Could Fall” In Love Again” adquiere la ligereza ligeramente polvorienta de un Jeff Tweedy en su lanzamiento.

Ahora los recuerdos se repetirán como el coro de un éxito.
Pero nos olvidamos de los versos que lo precedieron.
¿Y qué pasa con el lado B?
Y las caras que nunca volveremos a ver
(“Complacerme a mí mismo”)

En los trece capítulos de “Old Faithful”, la brevedad de las canciones va de la mano con la densidad de los versos, trazando un camino que cuestiona el tiempo (la memoria, los años que pasan) y la fe (la confianza en los demás, la necesidad de significado). Sodomsky dice que lo que le llamó la atención durante la escritura del álbum fue sobre todo una frase del libro escrito por Nick Cave con Seán O’Hagan, “Faith, Hope and Carnage”: “Quizás la búsqueda Y experiencia religiosa – el deseo de creer y la aspiración de que haya significado, el movimiento hacia lo inefable”. Una reflexión que resuena directamente en el epílogo de “Metronome Song”: “A pesar de todos mis progresos, todavía me mueve la duda/ Pero me consuela en el proceso/ De estar siempre un poco averiguando”, canta Sodomsky todavía sosteniendo un turno su guitarra acústica. El soplo del destino es el gran metrónomo, a nosotros nos corresponde buscar el acuerdo con su ritmo misterioso: “Aprender a hacer las paces con lo desconocido/ Escuchar el metrónomo lejano”.

27/06/2024

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