BARI – «Hoy es un día memorable no sólo para la comunidad de Taranto, sino para todos los ciudadanos de la Unión Europea». Y «la Región de Apulia comparte plenamente la orientación del Tribunal de Justicia porque las necesidades de la producción no pueden prevalecer sobre la protección de la salud y el medio ambiente». El gobernador de Apulia, Michele Emiliano, lo subraya al comentar la sentencia del Tribunal de la UE según la cual, si presenta peligros graves y relevantes para el medio ambiente y la salud humana, se deberá suspender el funcionamiento de la antigua acería de Ilva en Taranto. Emiliano habla de una “sentencia de época”.
Para Emiliano, «con una sentencia trascendental, el fallo en el asunto prejudicial planteado por el Tribunal de Milán en el contexto de la acción de cesación colectiva promovida por algunos ciudadanos de Taranto para la protección de sus derechos a la salud y a un medio ambiente sano gravemente dañados por la ex acería Ilva, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha establecido que la Directiva 2010/75/UE del Parlamento y del Consejo debe interpretarse del siguiente modo: la evaluación de los daños a la salud – subraya el gobernador – debe ser una evaluación integral y parte esencial del procedimiento de autorización para la producción y explotación de la misma instalación; para efectos de expedir y revisar la autorización para operar la planta, el Estado siempre debe considerar todas las sustancias emisoras nocivas de la planta, incluso si no fueron consideradas en la autorización original; en presencia de una actividad industrial que plantea peligros graves y relevantes para la integridad del medio ambiente y la salud humana, el Estado no puede diferir durante muchos años el plazo concedido al gestor para adaptar la actividad industrial; en situación de grave peligro comprobado para la integridad del medio ambiente y la salud, deberá suspenderse la actividad industrial”.
“Veremos – concluye – si el Estado italiano respeta las obligaciones imperativas y ya inaplazables establecidas por la Unión Europea”.
