Sucedió nuevamente en el mismo lugar y, como en el caso anterior, también esta vez se tomó la decisión correcta. Porque todo ese dinero podría serte útil, sobre todo si es más de lo que ganas en un mes de salario. Sucedió que una empleada de limpieza, durante su turno de trabajo en el interior del bar del área de servicio de Oasi degli Aranci (zona sur de Cisterna), encontró una cartera que contenía alrededor de 2.000 euros, un céntimo más, un céntimo menos.
Ciertamente, el encargado no empezó a contar el dinero; de hecho, inmediatamente hizo todo lo posible por localizar al legítimo propietario, que se alejaba del negocio sin darse cuenta de que acababa de perder la cartera con la importante suma de dinero. Gracias también a que el personal vio las imágenes de las cámaras de videovigilancia, se pudo localizar a la propietaria, una mujer que poco antes había realizado un pago en la caja registradora, punto no lejos de donde posteriormente se encontraron los 2.000 euros.
Así, cuando la mujer vio su cartera devuelta por quien la había encontrado, quedó tan asombrada como conmovida por el gesto de enorme altruismo, hasta el punto de exclamar: “Si todos fueran como tú, el mundo sería un mejor lugar.”
