«La nueva sede del Instituto Ellera en Viale Trento es insuficiente»

«La nueva sede del Instituto Ellera en Viale Trento es insuficiente»
«La nueva sede del Instituto Ellera en Viale Trento es insuficiente»

«La nueva sede del Instituto Ellera en Viale Trento en Viterbo no es adecuada para las necesidades de los niños, pedimos a la alcaldesa Chiara Frontini que cambie de opinión». Así lo afirma la secretaria general de la escuela de Uil, Silvia Somigli. «Recibí a unos padres del Instituto Ellera – explica Somigli – que me pidieron, en mi calidad de director nacional de la Uil scuola, sindicato confederal, intervenir ante la alcaldesa Chiara Frontini, para representar su oposición a una situación decididamente inadecuada. elección en la que el alcalde se dispone a trabajar tras las obras de renovación del Pnrr que comenzarán próximamente en el Instituto Ellera. La nueva sede en Viale Trento no es adecuada para las necesidades de los niños.”

«Por toda una serie de razones – continúa Somigli – que, razonablemente, la alcaldesa debería asumir, desde su escaño, un escaño que ciertamente garantice sentido común, razonabilidad y previsión. No se trata de no tener hijos y por tanto no interesarse por cuestiones relativas a la pedagogía social y cultural de la ciudad. No se trata de realizar análisis sobre los principales sistemas que deberían regular los procesos educativos – añade Somigli – Se trata más bien de garantizar el bienestar colectivo de una escuela, de la escolarización obligatoria por parte de quienes, en cambio, son específica y únicamente responsables de representar las condiciones más favorables y efectivas para que cada niño y todos los niños puedan ser protegidos por su alcalde. La escuela es un segundo hogar para un niño de primaria, ser sacudido durante la escuela no es precisamente apropiado, pero más en un contexto como el de Viale Trento, que no tiene nada que ver con la escuela primaria y menos aún con la dimensión educativa que es. , con modelos educativos y comportamentales. Además, me gustaría señalar – concluye Silvia Somigli – un gimnasio ausente y en todo caso externo a la escuela a la que deben ir los niños, dejando la “escuela” cruzando la calle, con el tráfico de la estación, para realizar actividad física”.

PREV Ha salido el libro sobre Rosario Livatino, el “niño juez”. Entre los comisarios se encuentra el autor de Manfredonia, Daniele Marasco
NEXT El coro de niños de la escuela Pascoli en el G7 sobre educación en Trieste – Foto 1 de 2