BRINDISI – Los habitantes de Brindisi se han comportado con extrema diligencia en estos días marcados por el G7, respetando las ordenanzas y las restricciones, sin decir una palabra. Alguien, sin embargo, quiso “destacar”. Estos son los delincuentes desconocidos que robaron las baterías de los semáforos LED instalados temporalmente en la carretera municipal de Torretta la noche del miércoles 12 al jueves 13 de junio.
Se trata del camino rural que conecta la carretera de la costa norte con el barrio de Paradiso, pasando por las ruinas del antiguo matadero. La arteria era utilizada por los autobuses STP que circulaban entre la ciudad y el aparcamiento habilitado para la ocasión en la localidad de Sbitri, cerca del pueblo de Acque Chiare. Ayer, con numerosas vías cortadas al tráfico, el ir y venir de autobuses fue continuo. Y la tarea de gestionar el acceso al paso subterráneo situado a unas decenas de metros de las ruinas del matadero recayó en el personal de la STP.
En ese punto, la carretera era demasiado estrecha para que pasaran dos autobuses a la vez. Por este motivo, se instaló un nuevo sistema de semáforos. Pero la incursión nocturna de los ladrones obligó a los operadores de la empresa a tomar el control en los semáforos, desde la mañana hasta la tarde: un inconveniente que con mucho gusto habrían evitado, en un día en el que los habitantes de Brindisi, hay que reiterarlo, mostraron gran sentido cívico en el respeto de las medidas y prohibiciones de seguridad.
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