ROMA, NY – El oficial de policía asesinado de Syracuse, Michael Jensen, regresó hoy a su casa en Roma.
El coche fúnebre salió de la oficina del médico forense en Syracuse alrededor de las 11 de la mañana.
Las calles estaban llenas de una comunidad agradecida y afligida. Hermanos y hermanas vestidos de azul, y las personas a quienes protegen, ofreciendo su respeto y un saludo final.
En la salida 33 de la autopista, más agentes de la ley, puestos en posición de firmes, mientras el oficial Jensen es llevado a la ruta 365, en medio de un flujo aparentemente interminable de autos. Luego, por las calles de Roma, donde una vez vivió.
La familia Collins, de Wampsville, vino a presentar sus respetos.
“Bastante asombrado. Tanta gente. Escalofríos. Tanta gente y tan trágico, algo así tiene que suceder. Tal como es la sociedad hoy”, dijeron Steve y Dawn Collins.
Si bien la sociedad, a veces, nos decepciona, la familia policial siempre aparece.
“El jefe de Syracuse está aquí hoy y hablé con el alcalde de Syracuse, que también estaba aquí con él. Muy trágico. Hablé con el sheriff Shelley por teléfono, poco después de que ocurriera el incidente, para ofrecerle nuestro apoyo. ” dijo el sheriff del condado de Oneida, Robert Maciol.
La Oficina del Sheriff del condado de Onondaga, lamentando la pérdida del teniente Michael Hoosock, quien también fue asesinado a tiros el domingo por la noche en Salina, envió un gran contingente a Roma en busca del oficial Jensen.
En la funeraria Nicholas J. Bush de Roma, innumerables romanos se reunieron para despedirse y agradecer.
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