Japón decide imponer nuevas sanciones a 42 empresas rusas, pero también a 11 entidades con sede en cinco países, incluidas China e India, por ayudar a Moscú a evadir medidas punitivas en relación con el conflicto en Ucrania.
La decisión de Tokio se produce tras las declaraciones del primer ministro japonés, Fumio Kishida, en la cumbre del G7 en Italia a principios de este mes, según las cuales su gobierno estaba evaluando un “nuevo paquete de medidas punitivas” en terceros países, que incluían la congelación de mercancías y la prohibición de exportar. . Las cinco naciones reportadas también incluyen a los Emiratos Árabes Unidos, Uzbekistán y Kazajstán, y las empresas incluidas en la lista negra incluyen a Alrosa, una empresa minera de diamantes rusa, y los fabricantes de aviones Tupolev e Ilyushin. Las sanciones japonesas, introducidas en varias fases desde el inicio de las hostilidades, afectan a más de 1.000 personas y a más de 150 entidades rusas, además de la aprobación de una lista de bienes y tecnologías cuya exportación a la Federación Rusa está prohibida, que ya contiene alrededor de 800 elementos . Japón “seguirá colaborando con los miembros del G7 y la comunidad internacional” para garantizar el cumplimiento de las sanciones contra Rusia, precisó durante una rueda de prensa el secretario del Gabinete japonés, Yoshimasa Hayashi.
