EL PARTIDO
Alemania es el segundo clasificado para los cuartos de final de la Eurocopa 2024 después de Suiza, que eliminó a Italia. En Dortmund, azotada durante la primera parte por una fuerte tormenta que detuvo el partido, la selección local reavivó el entusiasmo de los aficionados al vencer a Dinamarca por 2-0. El equipo de Eriksen y Hojlund jugó abiertamente, pero también se mantuvo a flote gracias a las paradas de Schmeichel, que fue decisivo en varias ocasiones, como por otro lado le pasó al menos una vez a Neuer. Ahora el técnico Nagelsmann está a la espera de conocer su próximo rival, que será entre España y Georgia, que se enfrentarán mañana por la tarde en Colonia. El joven entrenador de la defensa alemana decidió colocar a Ruediger, recuperado de una lesión, como defensa central junto a Schlotterbeck, en sustitución del sancionado Tah, y colocó a Raum en la izquierda en lugar de Mittelstaedt, mientras que en el centro del campo entró Sané en lugar de Wirtz. Fuellkrug no tiene plaza de salida, con la confirmación de Kai Havertz. El seleccionador danés, en cambio, confirmó el equipo típico, habiendo recuperado a Eriksen tras una leve enfermedad, con el único cambio de Skov Olsen en el exterior en lugar de Wind.
Alemania Dinamarca
Alemania, recién salida del empate con Suiza – que a la vista de la actuación suiza ante Italia hay que verla de otra manera – empezó a atacar y ya en el minuto 3 rompió el empate con Schlotterbeck, pero el gol fue anulado por Falta de Kimmich sobre Schmeichel. El portero danés bloqueó más disparos peligrosos de Kimmich, Haavertz y Schlotterbeck. Al estallido alemán le siguió el meteorológico, con una tormenta muy violenta que azotó el recinto del estadio y obligó al árbitro a interrumpir el partido en el minuto 35 y enviar a todos de vuelta a los vestuarios. El partido se reanudó al cabo de unos 30 minutos, con Schmeichel todavía protagonista, pero antes del descanso Hojlund tuvo dos ocasiones de gol, la segunda en el contraataque bien salvada por Neuer. El inicio de la segunda parte tuvo como protagonista al defensa danés Andersen: en el minuto 3 metió el balón en la red, superando en el cuerpo a cuerpo a Neuer, pero el gol fue anulado por un fuera de juego milimétrico de Delaney. Un minuto más tarde, desvió con el brazo un centro de Raum hacia su propia área, lo que provocó un penalti perfectamente convertido por Haavertz en el minuto 8. Una burla para Dinamarca y para el desafortunado jugador, que un cuarto de hora después dejó escapar a Musiala en el contraataque, que duplicó el marcador. Los daneses se esforzaron en marcar un gol para intentar remontar, exponiéndose a los contraataques de los locales, pero un poco de Schmeichel y un poco de poca precisión dejaron el resultado inalterado en 2-0.
