La quinta y sexta plaza de los ferraristi en el circuito de Montmelò dejaron consecuencias para el equipo del caballito más allá del resultado. En el GP de España, Charles Leclerc terminó detrás del líder del campeonato, Max Verstappen, luego de Lando Norris, Lewis Hamilton y George Russell. Pero por delante de su compañero Carlos Sainz, que corría delante de su público. Quizás por eso, planteó Leclerc, se arriesgó a realizar una maniobra que provocó el contacto entre los dos rojos. «La maniobra de Sainz en ese momento no fue correcta ni acertada. Sabíamos que teníamos que salvar el neumático y lo hice, pero él no lo hizo y me adelantó al final de la recta. Así fue, pero fue un riesgo que no se debería haber corrido”, se quejó a SkySport después de la carrera, “una pelea que nos hizo perder una posición, también porque dañó mi alerón. Entiendo que la carrera era importante para él, pero las cosas no son así. Hablaremos de ello en el equipo”.
Sainz no se culpa de nada
Al monegasco no le gustó el ataque de su compañero en las primeras vueltas de carrera, que forzó el adelantamiento y contactó. Pero el español no tiene nada de qué quejarse: «Para mí la situación estaba clara», respondió a distancia pero desde los mismos micrófonos, «teníamos un blando nuevo, Mercedes tenía un blando usado y teníamos que ir al ataque. Esto es lo que hice. No sé qué le pasó a Charles en la primera vuelta, no sé si cometió un error, pero tuve la oportunidad de adelantarlo y no es como si pudiera quedarme atrás por el resto de mi vida”. El episodio también fue abordado por director del equipo Fred Vasseur, intentando restarle importancia: «Hubo un pequeño contacto entre Sainz y Leclerc pero no perdimos nada, fuimos quinto y sexto y terminamos quinto y sexto. La conclusión es que tenemos que hacer un mejor trabajo el sábado”.
