(Reuters) – Los precios del petróleo se mantuvieron estables en medio de crecientes tensiones geopolíticas y expectativas de una mejor demanda de combustible este verano, mientras los inversores esperaban los datos de inflación de Estados Unidos esta semana.
A las 11.50 horas, los futuros del Brent para el contrato de agosto bajaban 41 centavos, hasta 85,59 dólares por barril, después de haber ganado un 0,9% ayer. Los futuros del crudo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) perdieron 33 centavos hasta 81,31 dólares después de subir ayer un 1,1%.
Ambos índices de referencia ganaron alrededor de un 3% la semana pasada, marcando dos semanas consecutivas de ganancias.
Los suministros de petróleo y combustible están disminuyendo y la demanda de gasolina está aumentando a medida que Estados Unidos, el mayor consumidor de petróleo del mundo, entra en su pico de consumo de verano.
Los retrasos en el recorte de las tasas estadounidenses podrían desacelerar la economía y limitar el crecimiento del consumo de combustible.
El petróleo también se ve respaldado por los continuos ataques ucranianos a la infraestructura petrolera rusa. El 21 de junio, drones ucranianos atacaron cuatro refinerías, incluida Ilsky, un importante productor de combustible en el sur de Rusia.
(Traducido por Laura Contemori, edición Francesca Piscioneri)
