Adiós al director Laurent Cantet, Palma de Oro con “La clase”

Adiós al director Laurent Cantet, Palma de Oro con “La clase”
Descriptive text here

El cine mundial ha perdido a uno de los directores más atentos en términos de compromiso cívico, dentro y fuera del set. Laurent Cantet, fallecido hoy en París a causa de una enfermedad a la edad de 63 años, no sólo fue el primer director francés en recuperar la Palma de Oro de Cannes en 2008, 21 años después de Maurice Pialat; no sólo fue un punto de referencia para toda una generación de cineastas y uno de los autores más jóvenes en ganar el Premio César a su ópera prima en 1999; fue ante todo un hombre y un director de convencido compromiso social. Así lo recuerdan con condolencias Festival de Cannes que lo define como “un humanista implacable, que buscó la luz a pesar de la violencia social, que encontraron esperanza a pesar de la dureza de la realidad. Su obra coherente y humanista es materia de un cine sensible, profundo y socialmente consciente.”

El gran público lo recuerda por la película. La clase que triunfó sorprendentemente en Cannes en 2008. Una película veraz como muchas de sus producciones, extraída del diario escolar del profesor François Bégaudeau. Concebido como un documental de ficción, protagonizado por el autor del libro y un grupo escolar real de clase media, es un retrato lleno de empatía y pasión hacia el mundo juvenil con todos sus miedos y esperanzas. Una película que anticipó las tensiones actuales y que mostró cuán complejos son hoy los roles del profesor y del alumno. En definitiva, un homenaje a sus padres maestros, que lo dieron a luz en Melle, Nueva Aquitania, el 11 de abril de 1961.

Después de la universidad en Marsella, ingresó en el IDHEC de París, donde se graduó en 1986. Entre sus compañeros se encontraban Dominik Moll, Gilles Marchand y Robin Campillo, que estarán a su lado en muchos momentos de su carrera y para quienes producirá en 2017. 120 latidos por minuto a su vez galardonado con el Gran Premio de Cannes. Cantet se convierte entonces en asistente de dirección de Marcel Ophuls en Velas de armas sobre el asedio de Sarajevo en 1994. Mientras tanto debutó como director con el documental Un verano en Beiruth (1990) y el cortometraje Todos a la manif (1994). Su primer intento en un largometraje se remonta a 1997 con Los sanguinarios producido para televisión. Cuando llega al teatro con su primera obra Recursos humanos en 1999 (ganador de dos Premios Cèsar) ya es un cineasta maduro y consciente: sabe que quiere dedicar su trabajo a la realidad de la gente corriente, a quienes luchan por llegar a fin de mes, a las cuestiones sociales. los siguientes El empleado du temps Y hacia el sur (realizada a principios de los años 2000) recorre los grandes festivales y lo sitúa a la cabeza de un nuevo movimiento del cine francés, capaz por fin de romper con los modelos de la Nouvelle Vague.

Cuatro años después del éxito de La clase (30 millones de euros de recaudación mundial) regresa a Cannes con la película colectiva 7 días en la habana que ganará en la sección “Una Cierta Mirada” y luego dedica la deslumbrante Regreso a Ítaca. Su carrera finaliza en 2017 con el taller Y Arturo Rambo de 2021 sobre la nueva generación de franceses norteafricanos. Cuando desaparece, Laurent Cantet sigue trabajando en un nuevo proyectoEl aprendizi, que se suponía que se lanzaría en 2025.

Siempre comprometido con la defensa de los autores y de las minorías sociales, en 2010 luchó junto a los “sans papier” por la protección de los inmigrantes y los trabajadores del espectáculo; en 2017 fundó la primera plataforma digital (La Cineteck) para la protección del patrimonio cinematográfico francés, apoyó la causa del colectivo 50/50 por la igualdad de género y el pasado mes de diciembre firmó, junto con 50 compañeros, la carta abierta solicitando una ” alto el fuego” en Gaza y para la defensa de los civiles palestinos y el regreso de los rehenes israelíes.

PREV Healthcare, encuentro en el mercado con Nocentini
NEXT Primero de Mayo: día de lucha, no de celebración