“Serena discutió con un chico el día de su desaparición”

Crimen de Arce, asesinato de Serena Mollicone

19 de abril de 2024

13:25

Continúan los testimonios en el Tribunal de Apelación por el asesinato de Serena Mollicone, la niña encontrada muerta en el bosque de Fontanacupa en junio de 2001.

El tío había visto Serena Mollicone discutiendo con un chico rubio el día de su desaparición. Así lo apoya Mariapia Fraioli, testigo escuchada por primera vez en la audiencia ante el Tribunal de Apelaciones de Roma. “Regresé a casa temprano en la tarde del 2 de junio y mi tío Carmine Belli estaba en casa: le pregunté si sabías quién desapareció. Él dijo que no. Entonces le mostré un folleto con la foto de Serena que teníamos para las búsquedas. Me dijo que la había visto el viernes por la mañana discutiendo frente al bar Chioppetelle con un chico rubio y que estaba llorando. Dijo que era ella.

El hombre fue visto la mañana del 1 de junio de 2001, el día de la desaparición y muerte de Serena Mollicone. “Dijo que Serena tenía pantalones negros y una camiseta roja. Dijo que el niño era rubio y tan alto como Serena”. Carmín Bellique será escuchado en la próxima audiencia, prevista para el 16 de mayo, es el trabajador del taller de carrocería primero acusado y luego absuelto por la muerte del joven de 18 años.

Laura Ricci, exnovia de Marco Mottola, también subió al estrado. Según la mujer, Mottola -acusado del asesinato junto a su padre, el excomandante de la comisaría de Arce, y su madre- la utilizó como coartada. En el proceso también están acusados ​​los carabinieri Francesco Suprano y Vincenzo Quadrale.

El carabinero Mollicone habla en la sala del tribunal sobre el asesinato: “Serena estaba molesta, no querían investigar”

“Recuerdo Marco Mottola, con quien estoy juntos desde 2002, casi un año después del asesinato de Serena, como un niño que deja que todo se le escape y casi incapaz de reaccionar violentamente incluso ante las provocaciones. En mi opinión no era capaz de matar. La única vez que lo vi preocupado y arrepentido fue cuando él y su familia se fueron de Arce. Marco fumaba, además de cigarrillos normales, también hachís y marihuana. Marco Mottola me pidió una tarjeta telefónica que le pertenecía. Yo tenía 17 años en ese momento. Después de un tiempo pensé que me habían utilizado para darle una coartada y que me habían explotado”.

Tags:

NEXT Primero de Mayo: día de lucha, no de celebración