En una entrevista al Corriere della Sera, el general insiste en el tema de la renovación del ejército, en particular en lo que respecta a la innovación tecnológica. “Y tenemos que darnos prisa y hacerlo, porque no sabemos qué pasará”
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En una entrevista concedida al Corriere della Sera, el general de cuerpo de ejército Carmine Masiello, jefe del Estado Mayor del ejército desde febrero de 2024, reitera la necesidad de renovación del ejército italiano. Se trata de una innovación integral que debe partir de la tecnología, un medio y no un fin, para fortalecer las herramientas, las estructuras, los sistemas de armas, pero también los procedimientos. “Y tenemos que darnos prisa, porque no sabemos qué pasará”, afirma. Para luego añadir que “Italia debe convertirse en una nación con una capacidad disuasoria real y creíble”.
Valores, formación y tecnología
El general Masiello insiste en los temas sobre los que articulará su mandato: valores, formación y tecnología. Sobre este último punto, subraya la urgencia de tecnologías “centradas en la integración de capacidades relacionadas con el dominio cibernético y la gestión del espectro electromagnético”. De hecho, servirán para proteger a las unidades italianas de los drones y de las municiones “inteligentes”, que forman parte de la llamada “tercera dimensión”. Fue la guerra entre Rusia y Ucrania la que nos enseñó que necesitamos recuperar los cambios y mantenernos al día. De hecho, el conflicto ha revolucionado los paradigmas en el terreno, por un lado hay un retorno al uso de la artillería, los tanques y el enfrentamiento entre unidades blindadas. Por otro lado, se ha convertido en una ciberguerra que ha utilizado -y utiliza- la desinformación para orientar la opinión pública y la moral de los combatientes.
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Italia no “en guerra”. La atención se centra en los jóvenes.
Italia, sin embargo, no está en “situación de guerra, pero sí en una competición que definimos por debajo del umbral”, afirmó. Pero “serán años de grandes crisis, hay que estar preparados”. Y también nos centramos en los jóvenes. Porque son ellos quienes saben interceptar los cambios y las evoluciones tecnológicas. “Pedí a todos que aportaran sus ideas: en este cambio todos deben participar, desde el cabo hasta el coronel. Mi lema es “las ideas no tienen grados”. Sé que no será fácil pero tenemos que hacerlo”.
