El tribunal de lo penal de Ille y Vilaine juzga esta semana a una pareja acusada de asesinato, tortura y actos de barbarie. La pareja, encarcelada desde hace cuatro años, fue detenida pocos días después del descubrimiento del cadáver de un jubilado de 63 años en su apartamento de la rue du maréchal Lyautey, en Rennes. Fue la noche del 17 al 18 de septiembre de 2020.
Quemaduras en el cuerpo, signos de estrangulamiento y orejas grapadas.
Ese día, al final de la jornada, el jubilado que vive solo en su apartamento, se cruza con esta pareja de inadaptados a la salida de una tienda de conveniencia. El jubilado los invita a venir a tomar una copa a su casa. A última hora de la noche, los vecinos dijeron que escucharon una discusión. Dos horas más tarde, los bomberos fueron llamados a un incendio. Luego descubrieron al jubilado tirado en la cocina, presentaba signos de golpes y estrangulamiento, pero también quemaduras importantes. Estas quemaduras fueron cometidas con una cuchilla caliente”,que podrían ser un par de tijeras”, indica la autopsia. El jubilado también presenta heridas de grapadora en la oreja y en los pómulos del rostro.
Abuso infligido para obtener un código de tarjeta de crédito
Los dos acusados cometieron este abuso para obtener el código bancario de la tarjeta de crédito del jubilado. Ambos lo admitieron durante la investigación. La mujer también admitió haber prendido fuego al apartamento antes de abandonar la zona. Inmediatamente después, ella fue Reconocida en las imágenes de videovigilancia de un cajero automático, luego dibuja algunos pasos de baile. La pareja, que se había conocido un mes antes de los hechos, fue detenida unos días después, mientras intentaban organizar su fuga para abandonar Bretaña. Ambos, que ahora tienen 35 y 42 años, corren el riesgo de ser condenados a cadena perpetua. El juicio comenzó este lunes 1 de julio en Rennes y se espera el veredicto el jueves por la noche.
