Para desenmascarar a su expareja, Turín le envía fotografías de pornografía infantil. Es juzgada y luego absuelta.

Ella se presentó a la policía y tiene se muestran tres fotografías en las que aparecen algunos menores involucrados en escenas con claro contenido sexual. Y le explicó al militar que las imágenes se las había enviado en el pasado su ex y que ella a su vez se las había devuelto con la idea de acumular pruebas para poder denunciarlo. Unas semanas más tarde, el hombre fue arrestado y puesto bajo arresto domiciliario.. Lo que no esperaba la mujer de 55 años era terminar bajo investigación y luego juzgada por posesión de pornografía infantil. La semana pasada el asunto llegó ante el juez de audiencia preliminar Paola Meroni: ella fue absuelta, mientras que su expareja deberá afrontar un largo período de libertad condicional.

Es otoño de 2022 cuando los dos acusados ​​se conocen. Entre ellos nace un gusto y entablan una breve relación. Un año después se presenta en comisaría y habla del lado oscuro de su ex. Luego, muestra tres fotografías: imágenes que ella misma le habría enviado en octubre de 2022 y febrero de 2023. Una de ellas contiene un comentario: “De todos modos, estas fotos también me gustan”. La mujer explica que lo hizo intencionadamente y que ese envío fue un “cebo” lanzado con el objetivo de inducir al ex a caer en una trampa.

Coordinar las investigaciones es el fiscal Davide Pretti, quien inmediatamente ordena un registro de la casa del sospechoso. Y así es como el hombre, trabajador especializado, Acaba esposado acusado de posesión y distribución gratuita de pornografía infantil.: en el ordenador personal los investigadores encontraron 37 mil imágenes con un contenido inequívoco.

En la primavera de 2024 el magistrado pide que ambos sean enviados a juicio, reprochando al hombre de 55 años haber difundido esas tres fotos duras. Asistida por el abogado Gino Arnone, la mujer se defiende ante el Tribunal. En el memorando de los autos del juicio, que se desarrolló con un procedimiento abreviado, el abogado habla de un claro “malentendido” y subraya cómo “gracias a las acciones del acusado se logró llevar ante la justicia a una persona que tenía en su poder 37 mil archivos de pornografía infantil”. No sólo eso, destaca cómo la acusación devastó a su clienta al “obligarla a someterse a una terapia farmacológica”.

El veredicto le da la razón. El juez de instrucción resolvió que la mujer fue absuelta porque “el hecho no existe”. El hombre, defendido por el abogado Andrea Bertolino, tendrá que someterse a un largo período de pruebas que incluye también cursos psicológicos y cursos de apoyo a la legalidad.

PREV Frontino, municipio de la región de Las Marcas en la provincia de Pesaro Urbino
NEXT Reabre la histórica tienda Coop de la familia Radenza en el centro comercial de Modica