También hay un Barbera d’Asti entre los vinos de élite premiados en los Decanter World Wine Awards, un prestigioso concurso internacional de la revista inglesa Decanter: se trata del Barbera d’Asti Superiore 2020 de Emanuele Gambino, enólogo de Costigliole d’Asti. quien recientemente inauguró su bodega con un resort vinícola contiguo. Los jueces expertos otorgaron a su “rojo” 97 puntos (sobre 100) y la Medalla de Platino. Sólo 18 vinos italianos lo han obtenido.
«Estoy muy feliz de haber sido premiado por uno de los concursos de vinos más prestigiosos y respetados del mundo – afirma Emanuele – Es un reconocimiento al trabajo serio y la dedicación de todo mi equipo, pero también a la calidad excepcional de nuestro terruño. Esta evaluación refleja nuestro compromiso constante con la producción de vinos que expresen mejor las características únicas de Barberà y de nuestro territorio.”
Las uvas de este Barbera proceden de un viñedo de Nizza Monferrato, en una colina especialmente adecuada. Se producen entre 5.000 y 6.500 botellas al año.
Esta es la nota de cata de Decanter: «Encantadores frutos de cerezas, moras y ciruelas llueven sobre capas aromáticas de hierbas mediterráneas y violetas terrosas. Brillante con energía y frescura, la viva acidez de la granada y los taninos exuberantes y estructurados se desvían hacia el sabroso final”.
EMANUELE GAMBINO, LA NUEVA GENERACIÓN TRAS LOS HUELLAS DE SUS ABUELOS
La de Emanuele Gambino, 41 años, es la elección de volver a la tierra: hoy él también es enólogo como lo eran sus abuelos. Estamos en Costigliole d’Asti, entre Langhe y Monferrato, colinas que la UNESCO reconoció como Patrimonio de la Humanidad en 2014. Emanuele nació aquí, territorios y lugares en los que tiene sus profundas raíces y cuyos paisajes, gentes y tradiciones ama.
«Yo personalmente produzco y vinifico mis uvas con pasión y amor – dice el empresario – prestando especial atención a la calidad, la sostenibilidad y la autenticidad de mis productos. Gracias a mis abuelos viticultores, desde pequeño he experimentado el ambiente de la vida rural, desarrollando la pasión por la tierra y por las cosas sencillas y genuinas. Estos elementos me llevaron luego, de adulto, después de un cambio radical en mi vida laboral, a seguir su ejemplo.”
Una elección tomada en 2016, año en el que Emanuele inició su carrera como enólogo, cuando inició su sueño de construir su propia finca en Costigliole d’Asti donde poder producir y vinificar sus uvas. Un sueño que hoy se ha hecho realidad.
