La sequía en Sicilia se agrava aún más debido al aumento de las temperaturas. Y el verano de 2024 será especialmente caluroso para la isla. Hay zonas, como la zona de Nisseno y la zona cercana a Enna, donde las precipitaciones, con acumulaciones superiores a los 20 mm en 24 horas, han estado ausentes durante mucho tiempo.
Mientras tanto, la agricultura está de rodillas. Hay muchos negocios que permanecen cerrados, muchos otros corren el riesgo de cerrar en cualquier momento. La escasez de agua también está arruinando a muchos agricultores. Ahora se pierden cosechas y los animales corren el riesgo de morir porque no hay agua. De hecho, entre Agrigento y Nisseno, las cabras se ven obligadas a beber barro para sobrevivir.
La gravedad de la situación.
Hasta ahora ha sido una fase seca de mediano plazo, pero está destinada a continuar si las lluvias no llegan en el próximo otoño e invierno.
Aunque todavía estamos un poco lejos de la larguísima fase seca que la caracterizó finales de los 90 y los dos primeros años del 2000, cuando la isla quedó completamente seca, Desde el punto de vista de la sequía agrometeorológica nos estamos acercando bastante.
Esto se debe a que, en los últimos años, las temperaturas medias anuales han sido muy elevadas, sobre todo en el último año, caracterizado por la ausencia de eventos fríos importantes en plena temporada invernal.
Entonces, aunque todavía estamos en un marco de sequía a mediano plazo, no a largo plazo, sin embargo, el impacto en la agricultura y las reservas de aguas superficiales parece muy similar al de 2002.
Esto se debe a que el aumento de las temperaturas medias ha agravado el impacto de la sequía, aumentando la tasa de evaporación de los suelos y aumentando las necesidades y el consumo de cultivos en todos los sectores. lLa suma de los efectos ha provocado una drástica reducción del caudal de las principales fuentes de agua de la isla.
¿Cuándo podría volver a llover en la isla?
Responder a esta pregunta no es fácil, pero ciertamente para ver las lluvias, aquellas capaces de dar un soplo de aire fresco a una región arrodillada, habrá que esperar hasta el próximo otoño, y sobre todo hasta el próximo invierno.
Bien es cierto que durante esta temporada estival no faltarán episodios de inestabilidad atmosférica, con lluvias locales y las inevitables tormentas de calor. Pero estos fenómenos serán demasiado irregulares, tanto en intensidad como en distribución geográfica.
Aunque puedan repetirse durante varios días, con fenómenos locales extremos, no tendrán un impacto significativo en la zona. Además en esta época del año las altas temperaturas del suelo ayudarán a evaporar gran parte de la lluvia que cae, sin dejar que se infiltre profundamente.
Las esperanzas puestas en los próximos meses
Habrá que esperar hasta el inicio de la próxima temporada de otoño para poder esperar la llegada de las lluvias, especialmente las provocadas por las intensas perturbaciones mediterráneas, que se forman en los mares que rodean la isla.
Tal vez al comienzo del próximo invierno 2024/2025, cuando el principal flujo perturbado sobre el Atlántico Norte disminuirá aún más en latitud, empujando las perturbaciones y los sistemas frontales oceánicos hacia el sur de Italia y Sicilia.
Así, en pleno invierno podría iniciarse una intensa fase de lluvias, El mejor momento para ver una recarga de nuestros acuíferos, dada la mala evaporación del suelo.
