Luciano Hellies guardó silencio ante el juez. El hombre de 77 años acusado de matar a puñaladas a su esposa Ignazia Tumatis, dieciocho años menor que él, hizo uso de su derecho a no responder durante el interrogatorio de ayer por la mañana.
Asistido por el abogado Roberto Olla, ni siquiera hizo declaraciones espontáneas para intentar, si fuera posible, explicar qué le llevó a propinar unos diez golpes a aquella mujer que -pese a que ambos vivían separados desde hacía tiempo en la casa- – era madre de sus cuatro hijas y abuela de sus queridos nietos. A las pocas horas del interrogatorio llegó la orden confirmando la prisión preventiva en prisión. Por tanto, el pensionado permanece en la penitenciaría de Uta.
La policía reconstruyó lo que ocurrió el jueves alrededor de las 23.00 horas en la casa de la planta baja de Via Podgora 5: Ignazia Tumatis regresó a casa y su marido le preguntó por qué no había regresado a cenar. Hubo una breve discusión en la cocina y cuando la mujer le dijo que era libre de hacer lo que quisiera, el hombre de 77 años agarró un cuchillo y apuñaló a su esposa una y otra vez. Luego llamó a su hija: “Yo maté a tu madre”.
El viernes por la noche, el médico forense Roberto Demontis realizó una autopsia al cuerpo de la mujer. El examen duró casi cinco horas y confirmó que había una decena de puñaladas.
Matteo Vercelli
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