Golpearon al portero del edificio del centro

Primero se desquitó con el portero del edificio, a quien golpeó. Luego arremetió contra una mujer sentada afuera de una tienda de comestibles, a quien comenzó a blandir una silla y amenazarla con arrojársela. Otra tarde de locura ordinaria bajo el túnel “Cisa”, en via Cairoli, en Latina, al final de la cual un extranjero ilegal en Italia fue denunciado por la policía y repatriado a su país de origen.

El ataque se produjo entre las 12 y las 12.30 horas de hace dos días, a un paso del Viale Don Morosini, una de las zonas más problemáticas de la ciudad y escenario frecuente de incidentes de este tipo. El protagonista, esta vez, es un hombre de origen africano, que se encontraba en un punto de la galería Cisa donde suelen parar varias personas sin hogar para consumir alcohol u otras cosas. El viernes uno de ellos, ilegalmente en Italia, se desquitó con el portero de una de las escaleras del edificio.

Una discusión que surgió por motivos triviales, según relatan los testigos, al final de la cual el extranjero le atacó golpeándole con el puño. En ese momento acudieron en su ayuda las personas que se encontraban allí, entre ellas la propietaria de una tienda de alimentación de productos de Europa del Este situada bajo el túnel, que defendió al portero junto a su hermana.

Y fue precisamente contra esta última contra la que el hombre arremetió, agarrando una silla que había frente al local y amenazando con tirársela. Por suerte la mujer, una joven de origen ucraniano, no sufrió heridas graves, sino sólo mucho susto. Mientras tanto, un empleado había llamado al número único de emergencias 112, y la denuncia llegó a la comisaría, que inmediatamente envió una patrulla del Escuadrón Volador. Cuando llegaron los agentes, encontraron al hombre todavía allí, aparentemente tranquilo.

Un rostro, el suyo, que no es nuevo para los cuerpos policiales locales, por los numerosos precedentes similares de los que ha sido protagonista a lo largo del tiempo. Luego de ser hecho abordar a una de las panteras y trasladado a sede policial para los trámites de identificación, este último fue denunciado por el delito de agresión. No sólo eso, dado que las investigaciones policiales posteriores permitieron poner de relieve la falta de cualificaciones legítimas para su estancia en el territorio nacional, lo que llevó a la oficina de inmigración a activar los procedimientos destinados a acompañarlo al centro de detención para su repatriación en Bari.

Traslado a Apulia por la policía pontina el mismo viernes por la noche, el hombre pasó allí las últimas horas para realizar posteriores actividades administrativas, útiles para su regreso a su país de origen. Un resultado fruto de la colaboración entre el equipo Flying y la oficina de inmigración, que ve a la policía de la comisaría de Latina constantemente comprometida en la lucha contra la permanencia de extranjeros irregulares en Italia. Muchos de los cuales, en Latina, suelen deambular entre Viale Don Morosini y Via Cairoli, en particular a los lados de la galería Pennacchi y bajo la galería Cisa, donde los residentes hablan de una degradación ahora generalizada y de una situación alarmante a la que se ven obligados. hacer los cálculos todos los días.

La semana pasada los hombres del nuevo comisario de policía Fausto Vinci tuvieron que intervenir en el túnel de Pennacchi porque otro extranjero se había vuelto loco sin motivo aparente.

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