AGI – Mint Butterfield, de 16 años, heredera y única hija de dos gigantes de Silicon Valley que desaparecieron misteriosamente el domingo de la casa de su madre, al norte de San Francisco, sigue siendo un misterio. La policía está recorriendo toda la zona en busca de rastros pero no hay señales. Las búsquedas se concentraron en el barrio Tenderloin, tierra de bandas criminales, vagabundos y narcotráfico, donde la niña pudo haber acudido en busca de refugio o quizás para encontrarse con alguien.
En el pasado, Mint había tenido problemas con el abuso de drogas y había expresado intenciones suicidas. Su desaparición está movilizando al mundo de las plataformas online, también porque la suya no es la historia de un menor cualquiera: su padre, Stewart Butterfield, es el fundador de la plataforma de mensajería online Slack, vendida en 2021 por 28 mil millones de dólares; Su madre, Caterina Fake, fundó en 2004 la plataforma Flickr, un sitio web multilingüe, incluido el italiano, donde los usuarios pueden compartir fotografías. Posteriormente, el sitio se vendió a Yahoo.
Los dos creadores de la aplicación, muy popular en Silicon Valley, están separados desde 2007, año del nacimiento de la niña. Según los investigadores, Mint dejó una nota en su casa, en la que decía que quería irse y que lo haría llevándose una maleta. No tendría móvil ni coche, dos elementos que dificultarían aún más su seguimiento.
El sheriff del condado admitió que existe el temor de que la niña se haya quitado la vida, aunque la hipótesis de la maleta deja algunas esperanzas. Pero a medida que pasan los días la situación se vuelve más preocupante. Los investigadores, sin embargo, descartaron la hipótesis de un secuestro con el objetivo de pedir un rescate a los padres. Un amigo de la niña dijo que vio Mint al norte de San Francisco, pero no proporcionó otros detalles útiles.
Mientras tanto, la fotografía policial de la joven heredera se ha vuelto viral en las redes sociales y en los medios estadounidenses: la niña es descrita como de poco más de metro y medio de altura, frágil, con el pelo largo y rojo, ojos maquillados y piercings en las cejas. En las redes sociales hay quienes aplauden su fuga y quienes le piden que regrese a casa, pero en X también hay quienes dicen cruelmente que no sienten empatía por una “niña mimada, drogadicta y multimillonaria”.
Fue vista por última vez en su casa el domingo por la noche, vestida con una camiseta negra, pantalones de franela y botas. La policía puso a disposición una serie de números de teléfono y solicitó en las distintas aplicaciones de chat informar cualquier detalle. Todo puede ser útil, explicó el sheriff, para localizar al adolescente que parece haberse desvanecido en el aire desde hace casi una semana.
