En el segundo episodio de Time Break, SuperTennis irrumpió en la casa de Elisabetta Cocciaretto.
“Coccia” inmediatamente dejó las cosas claras: “Te dejaré entrar, pero tienes que venir a correr conmigo una hora, como hago todas las mañanas”. Y así, con mucha buena voluntad, nuestra Elena Ramognino intentó en vano seguir el ritmo de la nativa de Las Marcas, investigando sus hábitos y pasiones.
Porque para darlo todo en los momentos más delicados dentro del terreno de juego también debes contar con tus experiencias y con la mujer que eres fuera del terreno de juego. Y descubrimos que Elisabetta fue deportista antes que tenista. Una mujer sumamente completa y madura a pesar de su edad, una mujer que estudia, que se interesa por la filosofía, que sabe lo que quiere de sí misma, del tenis y del amor, en todas sus formas.
No solo eso, Elisabetta nos leyó algunos pasajes del precioso cuaderno que abre a menudo durante los partidos en el cambio.
¿Único defecto? ¡No podrá aspirar a convertirse en una chef famosa, al menos hasta que respete los tiempos de cocción de la pasta!
Con ella, el equipo de Time Break bebió buen vino de la región de Las Marcas, bailó sin límites, voló en tirolesa en un lago e hizo bromas telefónicas. Y en todas estas actividades Eli fue un verdadero campeón.
