A la espera de entender cuál será el futuro de Dumfries, el club nerazzurri ha puesto sus ojos en el jugador suizo de Bolonia, de 23 años
La banda derecha sigue siendo un enigma para el Inter. Todo gira en torno a la decisión de Denzel. Dumfries. El extremo holandés aún no ha dado una respuesta definitiva a la propuesta de renovación del club nerazzurri. Por eso, en Viale della Liberazione llevan meses buscando alternativas en caso de una despedida anticipada de Dumfries. Uno de los nombres que aparecen en los cuadernos de Marotta y Ausilio es el de Dan Ndoye. El suizo de origen senegalés, de 23 años, fue protagonista de una excelente temporada con el Bolonia y la Eurocopa con Suiza representa un escaparate importante.
“En Basilea el balance total en dos temporadas fue de 12 goles y 15 asistencias. Cifras importantes, actuaciones de nivel y estadísticas que, según un estudio conjunto de Cies y Wyscout de la pasada primavera, sitúan a Ndoye entre los mejores regateadores sub-23 del panorama europeo“, subraya la Gazzetta dello Sport.
“Los goles han disminuido significativamente en comparación con los primeros años en Lausana y en Basilea, pero mucho depende del papel de lateral que el suizo ha comenzado a desempeñar continuamente desde su regreso a su tierra natal después del período en Niza. La temporada que terminó hace un mes le dio la razón al Bolonia, que el verano pasado apostó una suma importante (casi diez millones) por el potencial del joven de Nyon de 23 años que, en doce meses, ha más que duplicado su valor de mercado. Esto, al menos, es cierto según la dirección emiliana, que se inclina a pedir unos 25 millones”.
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