ignora a Ceferin durante la ceremonia de premiación, se dio cuenta de que la niña

Durante la ceremonia de entrega de premios por la victoria del Manchester City en la Supercopa de Europa, hubo un momento muy emotivo: Jack Grealish se detuvo justo antes de recibir la medalla de manos del presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, se había fijado en una persona a la que debía dedicar su atención.

Tras la amargura de la Community Shield perdida en los penaltis ante el Arsenal, el ciudad de Manchester reembolsado con la misma moneda el Sevilla en el Supercopa de Europa jugó el miércoles por la noche en Atenas. Tras el empate 1-1 en el tiempo reglamentario -y a falta de prórroga según el nuevo reglamento- el trofeo se decidió desde el punto de penalti y fue el último penalti el que acabó con la vida de los españoles, traicionados por el error de Gudelj, cuyo conclusión está impreso en el travesaño.

El Manchester City celebra el decisivo error de Gudelj desde el punto de penalti

Así ha llegado otro título en el año natural para los Citizens tras el histórico Triplete con el que cerraron la temporada pasada: es la primera vez que los celestes ganan la Supercopa, después de haber roto ya un tabú alzando su primera Champions League. en la Liga de Junio. Un momento para disfrutar al máximo, que tuvo su punto álgido en el momento de la entrega de premios, con la entrega de las medallas por parte del Presidente de la UEFA Aleksander Ceferin. Los jugadores del City se alinearon para recibir el premio, saludando mientras los oficiales se alineaban a lo largo de la pasarela que conducía al número uno esloveno, hasta el capitán Kyle Walker, quien levantaría la copa.

Pero la escena en ese momento se lo llevó Jack Grealish, que había jugado todo el partido como titular. El delantero inglés de 27 años interrumpió por unos momentos el flujo de jugadores a lo largo de la línea, haciendo un hermoso gesto que conmovió a todos en las redes sociales y le valió muchos elogios, no menos preciados que esa medalla de oro que Ceferin quiso regalar. a él. Cuando le tocó el turno, Grealish ignoró el gesto del presidente de la UEFA que pretendía premiarlo, pues le había llamado la atención una niña que estaba al lado del esloveno y a la que nadie le había prestado atención hasta ese momento..

Grealish notó que la niña estaba discapacitados visuales y se dirigió a ella de manera muy afectuosa, dedicándole unas palabras y dejando a Ceferin en espera. Solo después de unos segundos, el internacional inglés saludó calurosamente al jefe del fútbol continental, colocándole al cuello su merecida medalla. Un momento emotivo y sincero que cobra aún más sentido al conocer la historia personal del futbolista: una de sus hermanas, Holly, tiene parálisis cerebral. Terminar con esa niña le pareció a Jack lo más natural que podía hacer. De hecho, el más humano.

PREV toda la info, precios y cuando empieza
NEXT “Aún no hay autopsia, existe el riesgo de que la verdad desaparezca”