En el escenario habló casi para sacudirse estos terribles días. “Es una pesadilla”, dice con un intérprete a su lado. Taranjeet Singh es testigo, tiene 30 años y no habla italiano. También es un trabajador agrícola indio como Satnam. Se encontraban en el mismo campo la tarde del lunes 17 de junio. Estaba al menos a cien metros de donde ocurrió el hecho pero lo recuerda todo. «Escuché los gritos del empresario y también de Satnam. Le dije a su empleador que llamara a la ambulancia y pidiera ayuda, pero en lugar de eso dijo que de todos modos estaba muerto y que la ayuda no podía venir al campo y que hizo lo suyo. Estábamos los tres en el trabajo, estaba Satnam, la esposa, y ellos estaban distantes, Satnam – dice – estaba detrás del tractor donde estaba el patrón. Escuché gritos y el empleador empezó a maldecir y amenazar”. La historia del testigo es muy clara. “Vi todo y comencé a decirles que llamaran a la ambulancia, pero el empleador fue hacia la camioneta y cargó a Satnam, a su esposa y también a su brazo”.
Taranjeet Singh recorre su historia en Agro Pontino similar a la de muchos de sus compatriotas. «Cuando comencé a trabajar el empleador era una buena persona. Soy un trabajador ilegal y ganaba 5 euros con 50 céntimos la hora. Ahora, después de todo esto que ha pasado, ya nadie permite trabajar a quien no tiene documentos”.