“El consejo municipal del jueves 16 de mayo vio surgir todas las dificultades administrativas y políticas de la administración Ghinelli. No hemos recibido respuesta a nuestras preguntas sobre la seguridad y, en particular, a las preguntas sobre la Piazza della Badia y el coste de la seguridad privada utilizada en los jardines de Porcinai.
A esto se sumaron las declaraciones del alcalde en las que admitió errores y retrasos en las obras de construcción en Via Fabio Filzi. También son dignos de mención los numerosos ciudadanos que intervinieron durante la fase de “consejo abierto” para pedir la revisión del proyecto que afecta a la plaza principal de Saione. Por último, cabe señalar el reducido número de concejales mayoritarios que eligieron al nuevo presidente del consejo de auditoría.
El nombre en el que se centró la mayoría alcanzó 13 votos, cifra muy inferior a los 18 concejales presentes en el consejo y que puso de relieve los numerosos dolores de estómago entre las distintas fuerzas políticas que apoyan esta gestión. Lo que está sucediendo se traduce, aunque no las justifique, en las respuestas irritadas y a veces casi ofensivas que nuestro Grupo ha recibido en los últimos días por parte de algunos de los protagonistas de la mayoría.
Un nerviosismo cada vez más evidente que no es bueno para la ciudad y sus instituciones.”
