Cinco meses después de salir del quirófano para la implantación de un riñón que le donó su esposa, ganó el oro en el Campeonato Mundial de esquí para trasplantados, en Bormio, Lombardía. Esta es la hazaña de Paolo Manera (foto), de 49 años, un ingeniero constructor de la provincia de Cuneo con pasado como deportista de competición, que luego se vio obligado a abandonar debido a una enfermedad renal. Cuando entró en diálisis, la lista de espera para el trasplante no era corta, a pesar de que la actividad en Turín está en su punto más alto, como lo demuestran los datos publicados recientemente de 229 operaciones realizadas sólo en 2023.
La esposa del ingeniero decidió entonces ofrecer su órgano. Después de un cuidadoso período de análisis y repetidas pruebas realizadas al receptor y al donante, los especialistas dieron el visto bueno a la operación a pesar de la diferencia en el tipo de sangre. La pareja fue hospitalizada en la unidad semiintensiva de Nefrología, Diálisis y Trasplantes de Molinette, dirigida por el prof. Luigi Biancone. La operación fue realizada por equipos de cirujanos vasculares y urólogos del mismo hospital de Turín, dirigidos por el Dr. Aldo Verri y el prof. Paolo Gontero. No sólo el trasplante fue un éxito total, sino que después de sólo 5 meses el paciente participó en el Campeonato Mundial dedicado en Bormio, ganando la medalla más codiciada en el slalom gigante. Manera superó entre otros atletas a atletas austriacos y croatas muy competitivos. «El poder del trasplante de riñón, especialmente cuando se realiza a partir de un donante vivo, sigue sorprendiéndonos – afirma el prof. Biancone –. En poco tiempo puede borrar años de enfermedad y sufrimiento, como lo demuestra claramente este caso. Todo esto es posible gracias a la generosidad de los donantes, gracias a los cuales se pueden salvar numerosas vidas”.
