Frank Tyson, un afroamericano de 53 años, murió bajo custodia policial en Canton, Ohio, después de que un agente lo inmovilizara contra el suelo con la rodilla en el cuello y poco después gritara “No puedo respirar”. La policía publicó el vídeo de 36 minutos del incidente ocurrido el 18 de abril, sobre el cual se inició una investigación. Los agentes implicados han sido suspendidos temporalmente. Ese “No puedo respirar” recuerda los acontecimientos que precedieron a la muerte de George Floyd el pasado mayo de 2020 en Minneapolis y que afectaron profundamente a Estados Unidos y al mundo entero, dando nueva vida al movimiento Black Lives Matter.
Qué pasó
La policía estaba buscando a Tyson después de que el hombre chocó contra un poste eléctrico y se escapó, encontrando luego refugio en un club de veteranos. Cuando los agentes llegaron al lugar, Tyson comenzó a gritar “quieren matarme”. De fondo, informan los medios estadounidenses, se escucha una voz que dice “quieren ayudarte”. Luego, la policía lo detuvo y lo colocó en el suelo, mientras uno de los agentes lo inmovilizaba con la rodilla en el cuello durante al menos 30 segundos para permitir que otro agente lo esposara. Tyson comenzó a decir repetidamente “No puedo respirar” y los oficiales le dijeron que se calmara. Tyson permaneció inmóvil en el suelo durante más de cinco minutos, luego la policía le tomó el pulso y descubrió que no tenía pulso. Pasan más minutos antes de que se realice la reanimación cardiopulmonar, luego llega una ambulancia y el hombre es trasladado al hospital donde lo declaran muerto.
