Hace aproximadamente un año, la empresa Giubileo2025 SpA publicó una licitación para el suministro de 244 autobuses autobuses de metano destinados a ATAC, incluyendo mantenimiento por 10 años, más opción para 78 autobuses más. Valor global basado en la licitación: 181 Millones €.
Una de las características esenciales que exigía el Pliego era que los autobuses tuvieran 3 puertas. En la licitación participaron 2 empresas: Romana Diesel SpA y Solaris Italia Srleste último resultó vencedor, con apenas 0,9 puntos de ventaja.
La Compañía Romana Diesel recurrió entonces ante el TAR, encontrando una anomalía que a su juicio era perjudicial, ya que el vehículo de prueba presentado por Solaris a la Comisión Técnica de Verificación tenía sólo 2 puertas. La empresa Solaris había sido en todo caso expresamente autorizada por el Responsable Único del Procedimiento.
El TAR del Lacio aceptó el recurso, anulando la adjudicación a Solaris, condenando a las contrapartes (Giubileo2025, ATAC y Solaris) al pago de las costas judiciales (5.000 €) a favor de Romana Diesel (sentencia 02617/2024 de 02/09/2024) . El TAR indicó la consiguiente adquisición de Romana Diésel en la titularidad del contrato, sin perjuicio de los controles exigidos por la ley.
Solaris luego apeló el fallo, solicitando su suspensión (concedida), y presentando recurso de apelación ante el Consejo de Estado. Este último expresó su opinión con la sentencia 03518/2024 del 18/04/2024, anulando efectivamente la sentencia TAR y por lo tanto devolviendo el contrato a Solaris, considerando que la no conformidad del autobús de prueba (con 2 puertas en lugar de 3) no ha favorecido a Solaris a la hora de verificar las características técnicas, y que en todo caso los vehículos suministrados a ATAC serán de 3 puertas, tal y como exige el Pliego de Condiciones. Según el Consejo de Estado, la “muestra” (el autobús de prueba) no es un elemento constitutivo sino sólo un elemento demostrativo de la oferta, destinado a demostrar la capacidad técnica del fabricante. El Pliego exige que se ajuste “en la medida de lo posible” al objeto de suministro (y por tanto no necesariamente coincidente), para poder realizar las pruebas de control y asignar las puntuaciones pertinentes.
Solaris, desde la firma del contrato, tiene un plazo de 9 a 20 meses para entregar los 244 autobuses, a razón de 30 por mes. Por lo tanto, es probable que el suministro esté completo al final del Jubileo de 2025, aunque sea tarde para poder aprovecharlo plenamente en el período de mayor necesidad.
Todo este asunto es sólo uno de los muchos momentos destacados de la compleja situación de las adquisiciones del Ayuntamiento de Roma, entre licitaciones fallidas, recursos, contraapelaciones, litigios cuya existencia se descubrió por pura casualidad, como el del suministro de 121 nuevos tranvías.
Sólo un milagro podrá salvar a Roma de los años tan difíciles que atraviesa y que aún le esperan.
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