Los humanos no son los únicos mamíferos que trabajan para mitigar los efectos del cambio climático en el oeste de los Estados Unidos. La gente de allí también está solicitando la ayuda de los ingenieros más prolíficos de la naturaleza: los castores. Utilizando subvenciones proporcionadas por la NASA, dos programas de código abierto de la Universidad Estatal de Boise en Idaho y la Universidad Estatal de Utah en Logan están haciendo posible que ganaderos, administradores de fideicomisos de tierras, organizaciones sin fines de lucro y otros atraigan castores a áreas que necesitan su ayuda.
La Herramienta de Evaluación de Restauración de Castores (BRAT) creada por la Universidad Estatal de Utah utiliza datos de satélites construidos en el Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA en Greenbelt, Maryland, para identificar áreas que necesitan restauración y se beneficiarían de las habilidades de construcción de represas de los castores. El programa de Ayuda para el Monitoreo de la Restauración de Recursos Mesic de la Universidad Estatal de Boise (MRRMaid), que también utiliza datos satelitales, monitorea las áreas a lo largo del tiempo. Ambos esfuerzos también cuentan con el apoyo del programa de Oportunidades de Investigación en Ciencias Espaciales y Terrestres de la NASA y el programa de Conservación Ecológica de Ciencias Aplicadas de la agencia.
Una vez elegido el sitio, el personal del programa y los propietarios de tierras comienzan a tomar medidas para atraer a los castores, o los equipos pueden reubicarlos desde otras áreas. De cualquier manera, una vez en el sitio, estos constructores semiacuáticos se ponen a trabajar construyendo y manteniendo presas para crear los estanques. Los estanques ayudan a retener agua, incluida la escorrentía del deshielo y las tormentas, que de otro modo se precipitarían por la zona, provocando erosión y degradando los ecosistemas circundantes.
Con el tiempo, estos nuevos estanques elevan el nivel freático, sustentan humedales que atraen más vida silvestre y peces, y restauran plantas nativas al ecosistema. Las represas de castores pueden ayudar a los ganaderos a mejorar la disponibilidad de agua en sus propiedades, apoyando sus operaciones.
Además de ser hermosos y apoyar la ecología local, estos ambientes ricos en humedad pueden limitar el daño de los incendios forestales con una barrera de vegetación saludable resistente a la quema. Cuando hay infraestructura humana cerca, se puede agregar una fuga incorporada u otras intervenciones humanas para controlar el nivel del agua, evitando inundaciones que causen daños a la propiedad.
A medida que mejora la salud de un sitio de restauración, MRRMaid y BRAT utilizan datos satelitales de la NASA para monitorear esos cambios y analizar cómo los castores benefician al ecosistema en áreas afectadas por la sequía. Los líderes comunitarios pueden utilizar esta información y los ejemplos vivos de sitios restaurados para construir nuevos parques y áreas recreativas y planificar futuros proyectos de restauración con sus peludos colaboradores.
Para obtener más información sobre la reconstrucción de castores, visite:
Researchers Become “Beaver Believers” After Measuring the Impacts of Rewilding
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