La archidiócesis de Bogotá, presidida por el cardenal Luis José Rueda Aparicio, y la Conferencia Episcopal Colombiana, han anunciado, en dos comunicados de prensa respectivos, el fallecimiento del cardenal Pedro Rubiano Sáenz, arzobispo emérito de Bogotá, a la edad de 91 años, ocurrido en su residencia de la capital. El cardenal padecía problemas de salud desde hacía algún tiempo. Originario de Cartago (Valle del Cauca), Pedro Rubiano Sáenz nació el 13 de noviembre de 1932. Recibió su formación sacerdotal en el seminario de Popayán y en la facultad de teología de la Universidad de Laval, Quebec, Canadá. Fue ordenado sacerdote para la archidiócesis de Cali el 8 de julio de 1956. Nombrado obispo de Cúcuta en 1971, fue posteriormente arzobispo de Cali y, de 1994 a 2010, arzobispo de Bogotá y primado de Colombia. En el consistorio del 21 de febrero de 2001, durante el pontificado de Juan Pablo II, fue creado cardenal. Fue presidente de la Conferencia Episcopal Colombiana durante tres mandatos (1990-1993; 1993-1996; 2002-2005). Fue presidente del Comité Económico del Consejo Episcopal Latinoamericano y del Caribe (Celam) para el cuatrienio 2003-2007. Entre sus muchas funciones importantes, el cardenal fue vicepresidente de la Comisión Católica Internacional para las Migraciones y los Refugiados en Ginebra de 1983 a 1989. En 1995 fundó la Comisión Nacional de Conciliación con el objetivo de crear un organismo social y políticamente heterogéneo que ayudar a buscar soluciones políticas al conflicto armado colombiano, acompañar los esfuerzos de paz y establecer escenarios de confianza para los encuentros con los distintos actores. El funeral se llevará a cabo mañana miércoles 17 de abril, a las 10 horas, en la catedral de Bogotá.
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