Cuarenta y cinco personas murieron en Sudáfrica después de que el autobús en el que viajaban perdiera el control, chocara contra una barrera y cayera a un barranco, antes de incendiarse en la provincia de Limpopo, en el noreste del país.
Los pasajeros viajaban desde Gaborone, Botswana, en peregrinación para asistir a una ceremonia de Pascua en el área de Polokwane en Sudáfrica.
La ministra de Transporte de Sudáfrica, Sindisiwe Chikunga, acudió al lugar del accidente y expresó sus condolencias a las familias afectadas: “Nuestros pensamientos y oraciones están con usted durante este momento difícil. Seguimos instando a una conducción responsable en todo momento y con mayor cuidado ya que cada vez hay más personas en nuestras carreteras este fin de semana de Pascua.“.
El ministro añadió que el Gobierno repatriará los cadáveres y que sólo sobrevivió al accidente una niña de ocho años, que resultó herida y trasladada en avión al hospital.