Una repentina sensación de cansancio él atropelló Eileen Azzopardiuno mamá 36 años, y la sumió en un estado de letargo. Entonces si lo es dormido en el sofá y cuando dejó de responder y reaccionar la familia inmediatamente decidió pedir ayuda. La prisa por ir al hospital, luego la confusión de los médicos sobre qué hacer y la necesidad de comprender inmediatamente cuál era el problema: el coma inducida permitió realizar algunas pruebas.
La endoscopia reveló que parte de su intestino había dejado de funcionar y Eileen fue inmediatamente operada para intentar darle una oportunidad. Sin embargo, seis horas después, el cuerpo de la mujer se rinde y exhala.último suspiro delante de su familia.
La historia
Es la hermana de la mujer quien cuenta, desconsolada, los últimos días de Eileen y la desesperación de sus seis hijas. Según informa el Mirror, todo empezó durante las celebraciones de Pascua cuando, sin previo aviso, la mujer de 36 años comenzó a quejarse de un cansancio severo que luego empeoró hasta volverse letárgica y delirante.
No recordaba la contraseña de su teléfono inteligente. Luego se quedó dormida en el sofá.
La preocupada familia pidió ayuda y Eileen fue trasladada inmediatamente al hospital de Manchester, donde recibió una transfusión. Durante las siguientes horas, su estado siguió deteriorándose rápidamente y los médicos decidieron inducirle el coma para ganar tiempo. La endoscopia mostró que parte del tejido de la vejiga había muerto y trataron de arreglarlo con una cirugía oportuna.
Sin embargo, la familia fue advertida: las posibilidades de supervivencia eran escasas. Seis horas después, la mala noticia: el cuerpo de la mujer había dejado de luchar. Ocho días después de quejarse de fatiga intensa, Eileen dio su último suspiro y dejó a sus ocho hijas, de entre 12 y 18 años, lidiar con una pérdida inimaginable.
La hermana de Eileen, Susan, dijo al Manchester Evening News: “Tenemos un chat grupal donde nos consolamos intercambiando fotos de ella, para mantener viva su memoria”. Fue realmente terrible. Ni siquiera puedo mirar las fotos sin sentirme mal. Ver a mi madre perder a su hija, eso es lo que me mata. Lo desconectamos y él exhaló su último suspiro delante de todos nosotros. Fue muy difícil ver a sus hijas derrumbarse emocionalmente”.
Última actualización: domingo 28 de abril de 2024, 15.45 horas
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