Intesa Sanpaolo ha iniciado la colocación de nuevos bonos perpetuos del tipo Nivel 1 adicional (AT1) y “no rescatable” durante ocho años. La anterior colocación se remonta a finales del pasado mes de agosto con fecha de liquidación el 7 de septiembre. En aquella ocasión, el banco italiano recaudó 1.250 millones de euros. Fue un “no rescatable” durante los primeros seis años. Dado que los valores se emiten sin vencimiento, es posible que nunca se produzca el reembolso del capital. Sin embargo, los emisores se reservan el derecho de proceder al reembolso en una o más fechas de reinicio, después de un período garantizado a los inversores durante el cual no podrá haber reembolso.
Los bonos Intesa Sanpaolo ofrecieron en septiembre un cupón bruto anual del 9,125%, lo que resultó en un diferencial del 6,262% sobre el tipo de mercado correspondiente. El bono podrá reembolsarse entre el 7 de septiembre de 2029 y el 7 de marzo de 2030. Si esto no sucediera, el cupón pasaría de fijo a variable y sería igual al tipo “midswap” a 5 años, incrementado en un margen del 6,262%. En la actualidad, se situaría en el 9,132%, sustancialmente en línea con el fijado en cuestión.
Tenga en cuenta que los bonos Intesa Sanpaolo AT1 tienen un precio actual en el mercado secundario de 111,46. A este precio, si la opción de compra se ejerciera en septiembre de 2029, el rendimiento de hoy sería poco menos del 6,65%. Estos datos también afectarán el precio de la nueva emisión. Los altos rendimientos se ven afectados por riesgos igualmente alto. Los bonos AT1 están subordinados, no pueden pagar ningún cupón si el ejercicio cierra con pérdidas y también pueden liquidar el capital si el indicador de capital CET1 cae por debajo del nivel establecido para el activador. Al final del primer trimestre, se situaba en el 13,3%, un nivel teóricamente muy tranquilizador para los tenedores de bonos.
La emisión de bonos se produce después de que Intesa Sanpaolo publicara la semana pasada los datos de los tres primeros meses del año.
El beneficio neto aumentó un 17,6% hasta 2.301 millones de euros. Los ingresos netos también aumentaron un 11,1%.
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