FP CGIL BRINDISI: PROBLEMAS CRÍTICOS SERIOS EN EL PPIT DE MESAGNE – SOLICITUD DE INTERVENCIÓN INMEDIATA – Aquí Mesagne

2

Luciano Quarta Secretario General de la Función Pública CGIL Brindisi:

pretendemos llamar la atención de la Comunidad sobre la gravísima situación en la que se encuentra el Punto Territorial de Primera Intervención (PPIT) de Mesagne, donde las condiciones de trabajo se han vuelto literalmente inhumanas.

Ayer se conoció la noticia de que, además de que el aire acondicionado ya no funciona desde hace algún tiempo, también se rompió una persiana que no permite el intercambio de aire. Las abrasadoras temperaturas de estos días, sumadas al calor desarrollado por la maquinaria presente, hacen insostenible la estancia de los trabajadores en el interior del local.

Desde hace tiempo denunciamos el deterioro de la estructura relativa al PPIT 118 de Mesagne, con el personal de ASL y Sanitaservice obligado a hacer todo lo posible para garantizar la protección de la salud de los ciudadanos y el bienestar y la seguridad de los pacientes, creando condiciones potencialmente peligrosas.

Enzo Maglie ASL BR Representante de los Trabajadores de Seguridad de FP CGIL Brindisi:

Esta situación viola claramente lo dispuesto en el anexo 4 punto 1.9 del Decreto Legislativo 81/08 sobre el microclima, que exige garantizar: “Ventilación de los lugares de trabajo cerrados 1.9.1.1. En los lugares de trabajo cerrados, es necesario garantizar que, teniendo en cuenta los métodos de trabajo y los esfuerzos físicos a los que están sometidos los trabajadores, estos tengan acceso a aire sano en cantidades suficientes, obtenido también con sistemas de ventilación”.

Además de las deficiencias ya señaladas desde hace algún tiempo, como la puerta de entrada electrónica que nunca ha sido reparada y siempre está abierta (exponiendo al personal de ASL y Sanitaservice a riesgos y a las inclemencias del tiempo) y las puertas interiores que ya no cierran, la cuestión de Los aires acondicionados que no funcionan y las persianas enrollables representan el punto de no retorno.

Francesco Pollasto Coordinador de Salud FP CGIL Brindisi:

Nuestro personal sanitario, que ya se encuentra en dificultades, se ve ahora sometido a una condición adicional e inaceptable: tener que lidiar con disfunciones estructurales que comprometen el sistema de aire acondicionado, que desde hace tiempo no funciona en esta zona.

Esta situación, además de poner en peligro la salud y la seguridad de los trabajadores, corre el riesgo de influir negativamente en la calidad de la asistencia sanitaria prestada.

Hasta la fecha, ni siquiera el paliativo de los toldos ya se puede utilizar, ya que llevan un tiempo rotos y nunca han sido reparados. Las contraventanas que se cierran a la fuerza crean un ambiente insalubre debido a la falta de intercambio de aire. Esta condición no sólo alimenta nuestra preocupación, sino que representa una flagrante violación de las normas sobre seguridad laboral y protección de la salud del paciente.

Estas cuestiones críticas se suman a las numerosas quejas presentadas por el Servicio Público CGIL Brindisi y nunca resueltas por quienes deberían gestionar el servicio, lo que sigue generando malestar a los trabajadores. Quien gestiona el Servicio 118 debe garantizar el máximo apoyo logístico, asegurando ambientes de trabajo saludables, cuando por el contrario tiende a crear problemas con tarjetas horarias y turnos.

Desde hace tiempo venimos pidiendo una intervención inmediata, decidida y decisiva de la ASL Brindisi para abordar y resolver esta situación, ya que es de fundamental importancia garantizar un entorno de trabajo y cuidados seguro, saludable y sobre todo pacífico, respetando la normativa vigente. para el personal y los pacientes.

Teniendo en cuenta el calor africano de estos días, entendemos que el problema fue inmediatamente comunicado a los coordinadores de enfermería responsables del 118, que no dieron respuesta.

Por lo tanto, una carrera de esperanza hacia el hospital puede convertirse en una dura prueba para los trabajadores, que tendrán que subir a ambulancias después de sufrir horas de calor. Los empleados se encuentran sudorosos y sin aire. Cuando las temperaturas exteriores no son excesivas, la situación es manejable, pero en cuanto superan los 26 grados, como en los últimos días, el PPIT se convierte en una sauna.

Es una situación invivible. Los trabajadores están agotados, también por el fuerte calor de esta época. Para los operadores, la situación parece muy compleja, teniendo en cuenta también la necesidad de llevar uniformes pesados ​​y protección.

Es importante subrayar los efectos del calor no sólo en los trabajadores sino también en los ciudadanos. Las altas temperaturas provocan un aumento importante de las llamadas al 118, especialmente por enfermedades relacionadas con el calor como golpes de calor, deshidratación e insuficiencia cardíaca. Este aumento de la carga de trabajo, combinado con las condiciones inhumanas en las que se ve obligado a trabajar el personal, crea una situación de riesgo extremo tanto para los trabajadores como para los pacientes.

En vista de lo anterior, la FP CGIL Brindisi exige:

1. Intervención inmediata para reparar los daños y restablecer la plena funcionalidad de los aires acondicionados del PPIT Mesagne.

2. La restauración oportuna de las contraventanas y la reparación de la puerta de entrada y de las puertas interiores.

3. La implementación de medidas urgentes para garantizar un entorno de trabajo saludable y seguro para el personal y los pacientes.

En ausencia de comentarios concretos y acciones tangibles dentro de los 5 días posteriores a la recepción de esta carta, nos veremos obligados a tomar todas las acciones sindicales y legales necesarias para proteger la salud y la seguridad de los trabajadores y ciudadanos.

El secretario FP CGIL Brindisi RLS ASL Brindisi El coordinador sanitario FP CGIL Brindisi

Camisetas Luciano Quarta Enzo Francesco Pollasto

PREV Alvino: “Kvara-Napoli, la renovación se hará. ¿Chiesa? Siempre lo he criticado por una razón”
NEXT En Gallarate un curso para convertirse en “enfermero” de gatitos