Variante de la SS16 en Rimini, existe una fuerte oposición a la construcción por parte del comité contrario

Variante de la SS16 en Rimini, existe una fuerte oposición a la construcción por parte del comité contrario
Variante de la SS16 en Rimini, existe una fuerte oposición a la construcción por parte del comité contrario

“Después de un análisis en profundidad del plan PTAV, se han puesto de relieve numerosas críticas y preocupaciones en relación con el impacto ambiental, económico y social del concepto de movilidad propuesto y promovido – declara en un comunicado de prensa Comité ‘No a la variación del SS16 Rimini – Protejamos nuestro territorio’. En particular, se destaca que las opciones estratégicas vinculadas al tema de la movilidad no están del todo alineadas con los metaobjetivos y las trayectorias definidas por el plan y promovidas en los medios de comunicación, que pretenden abordar y tienden a resolver desafíos importantes como la descarbonización. , la reducción del consumo de suelo, el aumento de la biodiversidad, la resiliencia urbana y territorial, así como su cohesión”.

En esencia, el Comité “No a la variación del SS16 Rimini – Protejamos nuestro territorio” cree que “las líneas estratégicas en materia de movilidad requieren una mayor elaboración, con la inclusión de acciones más incisivas a medio plazo (en términos de reducción de la circulación , mejora de la calidad del aire y reducción de los tiempos de viaje), que no dependen de la construcción de grandes obras de infraestructura innecesarias cuya mitigación nunca se completará, como por ejemplo la variante a la SS16 prevista para el tramo principal coplanar con la A14”.

La implantación de la variante a la SS16 “supondrá un aumento significativo de la contaminación atmosférica y acústica, exponiendo a los ciudadanos a niveles de calidad del aire que no se ajustan a los estándares permitidos”.
Esto “tendrá graves consecuencias para la salud pública y el medio ambiente: analizando los mapas queda claro que todo el recorrido de la variante se prevé en un contexto de peligro geomorfológico, hidráulico e hidrogeológico en el que las intervenciones de transformación deben limitarse en zonas de alto riesgo”. predisposición”.
La construcción de tan imponente obra “expone también el territorio a riesgos respecto de la salubridad de los acuíferos sobre los cuales se construirá la obra, lo que producirá sus efectos negativos de alteración del clima no sólo una vez finalizada, sino también a largo plazo”. de los puestos de trabajo”.

Y nuevamente: “La construcción de la variante implicará el hormigonado de 28 km de largo y 35 metros de ancho, lo que dará como resultado un ancho total de 50 metros y un total de 14 carriles. Este proyecto provocará el cierre de varias empresas; tenga en cuenta que se cementarán 500 hectáreas de valiosas tierras agrícolas, sólo en la zona de Rimini Nord y sus alrededores. Provocando la impermeabilización de una importante porción de territorio, con un total de 1,2 millones de m2 de asfalto y 140.000 m2 para obras de construcción.

Según el Comité “No a la variante SS16 Rimini – Protejamos nuestro territorio”, crear una oferta de carreteras “significa fomentar el uso del coche: la variante no solucionará los problemas de congestión del tráfico, ya que los mismos estudios realizados de Anas destacan que la variante desviará aproximadamente 12.000 vehículos diarios de la A14, mientras que los que no circularán por la actual SS16 serán aproximadamente 5.000, con un aumento del tráfico diario de +7.000; Además, la construcción de la variante SS16 costará alrededor de 600 millones de euros, cantidad que probablemente aumentará aún más durante la construcción”.

El Comité “No a la variante SS16 Rimini – Protejamos nuestro territorio” afirma que “el proyecto no tiene en cuenta alternativas más sostenibles, como la inversión en transporte público local y la micromovilidad, que podrían reducir significativamente el uso de coches y sus impactos ambientales; invertir en transporte público local y en infraestructuras de movilidad ligera tiene un coste significativamente menor en términos económicos en comparación con la construcción de la variante, cuyos costes también serán elevados en términos ambientales y de salud, como se ha mencionado varias veces”.

El Comité “No a la variación del SS16 Rimini – Protejamos nuestro territorio” es un río desbordado: “La obra una vez creada permanecerá para siempre, no es reversible. Otra cosa es invertir en transporte público local y en compartir la movilidad, cuyas evoluciones también gracias a las nuevas tecnologías digitales permiten una gran adaptabilidad a las dinámicas locales, creando una diferencia sustancial entre una elección reversible y una elección irreversible. Si bien el anterior plan de coordinación territorial provincial ya esperaba una disminución del consumo de suelo, el resultado fue exactamente el contrario, con un aumento constante de las obras de urbanización, incluso las de muy alto impacto, concentradas aguas abajo de la carretera estatal o a lo largo de ella, inevitablemente continúa. generar tráfico donde los espacios ya no lo permiten, e incluso ya no permiten la introducción de vegetación que permita bajar las temperaturas de la ciudad, en lugar de capturar CO2, etc. Por lo tanto, una innovación adicional y saludable sería pensar primero en un sistema de carreteras servido por transporte público local o rutas para micromovilidad y luego en subdivisiones/urbanizaciones, de lo contrario no surgirá el problema de la movilidad”.

Y no termina aquí: “La administración, en varias sesiones, ha admitido que la Variación tiene un impacto extremadamente impactante, declarando que está activamente comprometida en intentar realizar cambios destinados a reducir el daño. Por ahora sólo se han presentado cambios menores, principalmente en los cruces y pasos inferiores, dejando sustancialmente inalterado el trazado general y por tanto los hipotéticos daños. El Viceministro de Infraestructuras, Bignami, declaró explícitamente a la prensa que la Vía es tan antigua como el proyecto y que mientras tanto el territorio ha cambiado, por lo que ya no es actual, invitando a las administraciones a proceder a la modificación/actualización de el proyecto. Todas las asociaciones ecologistas de la zona están clara y firmemente en contra de la realización del proyecto y han propuesto, en varias ocasiones, diversas modificaciones/alternativas”.

“Estudios e investigaciones a nivel mundial dicen claramente que la construcción de nuevas carreteras incentiva el uso del automóvil privado, continuando un círculo vicioso que ya no es sostenible o lo es hasta que se consume hasta el último pedazo de tierra que queda. . El Municipio promueve el Plan Verde (aplazado por varios años) y apoya el PTAV, que utiliza temas ambientales, de regeneración urbana y de desarrollo sostenible como portada del proyecto, así como elementos esenciales y constitutivos del plan estratégico. Reconociendo expresamente la necesidad y urgencia inmediata de un cambio sustancial en la forma en que diseñamos la ciudad. Institutos públicos como Ispra continuamente dan la alarma sobre los riesgos derivados del consumo de suelo. Aunque en realidad la noticia basta para comprender su gravedad… Seguimos creyendo, a pesar de todo, que si mañana llegaran mágicamente los 500 millones y el resto necesarios para construir el proyecto, se haría al instante, olvidándonos en en un abrir y cerrar de ojos lo dicho y analizado más arriba… Quizás hay algo que no funciona correctamente, a la hora de traducir en acciones concretas lo declarado y anunciado”, apoya finalmente el Comité “No a la Variante SS16” Rímini – Protejamos nuestro territorio”.

PREV Milán, la campaña de abonos 2024/2025 está en marcha: información útil
NEXT Véneto: nuevo Plan Energético