En el caso del asesinato de Pierina Paganelli, ocurrido en Rímini el pasado mes de octubre, se sigue la pista de un crimen pasional. La relación extramatrimonial entre el único sospechoso, Louis Dassilva, y la nuera de la víctima hizo sospechar a los investigadores.
Los investigadores están cada vez más convencidos: el asesinato de Pierina Paganelli fue un crimen pasional. Desde hace ocho meses, la brigada volante y la Fiscalía de Rímini analizan el contexto social de la víctima.
Las principales pruebas que podrían resolver el caso ya están en manos de los investigadores, pero se esperan los resultados de las pruebas realizadas en la escena del crimen. La única persona investigada por el momento es el vecino de la pensionista asesinada el pasado mes de octubre en el garaje de su condominio con numerosas puñaladas, Louis Dassilva, que estaba vinculado sentimentalmente con Manuela Bianchi, nuera de la víctima. Un vínculo confirmado también por unos escritos de amor encontrados en el lugar donde ambos se encontraban.
La principal hipótesis de la investigación -según informa la prensa local- es la de un asesinato pasional no premeditado. Luis, enamorado de Manuela, habría visto en Pierina un obstáculo para la relación.
Las pruebas de laboratorio serán cruciales para confirmar esta teoría, en particular las huellas en la ropa interior de la mujer, cortada con un cuchillo, y en el bolso de Pierina, encontrado ensangrentado junto al cuerpo.
Louis y Manuela, según retransmisiones televisivas, siguieron saliendo a pesar de la sospecha de asesinato, y Manuela y Valeria Bartolucci, la esposa de Dassilva, siguieron defendiéndolo.
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