La de Emanuela Orlandi es “una historia intrínsecamente política, ligada a las tensiones de la época, que revela una pista internacional, la utilización de Alì Agcà como peón de la Guerra Fría, en relación con sus acusaciones contra Moscú de haber instigado el ataque , posteriormente retractada; y otra económica, ligada a los escándalos financieros y a la opacidad de determinadas relaciones entre los hampas y los círculos eclesiásticos”. Así lo confirmó el periodista de investigación del Corriere della Sera, Fabrizio Peronaci, oído ante la comisión bicameral de investigación sobre las desapariciones de Mirella Gregori y Emanuela Orlandi. La audiencia, que comenzó a las 10.30 con el periodista de Tempo Gianni Sarrocco, se prolongó durante casi tres horas. Además de un memorando, Peronaci entregó 28 documentos adjuntos.
Respecto a Emanuela Orlandi, Peronaci afirmó: “El secuestro fue premeditado durante mucho tiempo. Es difícil creer en la conexión sexual: un maníaco o un pedófilo no acecha a sus víctimas durante días ni solicita la intervención de los servicios secretos”.
Luego hay una entrevista de Ercole Orlandi del 11 de mayo de 2001 en la que el padre de la mujer revela: “Mi hija fue secuestrada por los servicios secretos” y la anomalía de su tío, Mario Meneguzzi, que se convierte en portavoz de la familia. Peronaci recordó a continuación los papeles protagonistas de los magistrados Ilario Martella (juez de instrucción del caso de 1985 a 1990) y del juez Imposimato, “fuertemente convencidos del secuestro con fines de chantaje político nacido en Moscú”. Peronaci también recordó la frase que Ercole Orlandi dijo en su lecho de muerte según relató su hijo Pietro: “Fui traicionado por aquellos a quienes serví”.
Un detalle desconocido surgió hoy de la audiencia de Gianni Sarrocco. “Cuando fui a la escuela de música de Emanuela Orlandi para hablar con el director, el portero me hizo firmar el registro de visitantes y vi que delante de mí estaba el nombre de Gangi con los Servicios Secretos escrito al lado y le pedí al fotógrafo que tomara una foto”. “Gangi – añade el ex periodista de Tempo – después se supo que efectivamente estaba en el Sisde y que estaba prometido con una prima de Emanuela”. Sin embargo, Sarrocco informó que ya no tiene la foto porque “nunca ha sido publicada”, “puede haber quedado en los armarios del periódico”.
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