Rímini no es el único que busca nuevo entrenador. Desde hace días, permaneciendo dentro de los muros del grupo B, el Sestri Levante busca nuevo entrenador. Quién podría decidir centrarse en el ex entrenador del Lucchese, el de la temporada pasada, Ivan Maraia. Pero a los ligures ni siquiera les importa el entrenador del Génova Primavera, Alessandro Agostini. En resumen, los ligures están planificando el período post-Barilari. Barilari, al que no le faltan pretendientes teniendo en cuenta que Pontedera (para el período post-Canzi, recién fichado por la Juventus Women) y la Juventus Next Gen, todavía enfrascada en los playoffs, también parecen haber pensado en él. Arezzo también busca entrenador considerando que los indios podrían viajar a Pistoia, en compañía del director deportivo Giovannini. Los toscanos piensan en Braglia, que acaba de despedirse de Gubbio. Por eso los umbros también buscan un nuevo timonel. Lucchese y Virtus Entella no participarán en el vals de los entrenadores. Gorgone permanecerá en Toscana, mientras que la salvación conseguida en una temporada muy complicada le valió la confirmación de Mister Gallo en Liguria. Sin embargo, el baile apenas ha comenzado.