Un mes sin el abuelo Giovanni, la carta de amor de su nieta Valentina – BitontoLive.it

Publicamos la conmovedora carta de amor de su nieta Valentina Gasparre a su abuelo Giovanni Putignani, fallecido el 15 de abril. Un hombre especial, amante de la ciudad y de la naturaleza, que cuidaba los parterres de Largo Caldarola.

Ha pasado un mes y hay un gran vacío. Así que decidí escribir y publicar estas palabras, para que te lleguen hasta allí y porque escribir te hace inmortal y quisiera fijar aquí también tu memoria, para siempre.

Mi abuelo Giovanni Putignani, como mi abuela Graziella, es conocido por todos.

Un hombre elegante, distinguido, siempre ordenado y cuidado. Todavía recuerdo cuando me pediste que te cortara un pelo de la nariz, que sólo tú podías ver, y te garantizo que en realidad estaba ahí.

Pasamos mucho tiempo juntos, y en ese tiempo me permitiste conocer tus fragilidades y tus miedos, que un hombre fuerte como tú siempre guarda para sí, y cada día traía a casa algo de ti.

Me enseñaste la elegancia, la dignidad del dolor, la compostura, la capacidad de adaptarte a situaciones difíciles y reinventarte con el paso del tiempo, con ingenio. Me enseñaste que los obstáculos se pueden superar con mucha buena voluntad y terquedad, que se puede ir avanzando paso a paso.

Nos enseñaste la acogida, la sociabilidad, la hospitalidad, la alegría de celebrar en convivencia, la importancia de una familia unida, la generosidad, el arte de ser amigos de todos pero sabiendo en qué amigos confiar.

Cuidar el medio ambiente, no generar residuos. Incluso acabaste en el periódico como el abuelo que cuidaba los parterres de Piazza Caldarola, con una naturalidad y una humildad desarmantes. Con tus “dos pasos” diarios, has recorrido caminos y construido historias, has dejado huella en muchos.

Eso sí, tenías tu temperamento, realmente no querías dejar de fumar, siempre tenías algo que hacer, tenías que arreglarlo todo a tu manera con tu pedido, la ropa, los pañuelos… esos dulces siempre. Presentes en el bolsillo, el café frío con azúcar, el zumo de pomelo y el inevitable cigarrillo.

Un hombre de una sola pieza, de huesos duros y corazón fuerte, contra toda evidencia científica, un bastón en una mano y un cigarrillo en la otra, capaz de entablar amistad con cualquiera.

Nos despedimos rápidamente, porque ya sabías que nos volveríamos a ver al poco tiempo.

Me enseñaste lo que significa sentirte libre de elegir sobre tu vida y de autodeterminarte, hasta tu último aliento.

Entonces, decidiste dormir tranquilamente sin molestar a nadie, con total autonomía de decisión, porque nunca te gustó preguntar, con tu inconfundible estilo anticuado, después de haberte afeitado y fumado tu último cigarrillo. Hiciste que nos encontráramos todos casualmente al mismo tiempo a tu alrededor, porque una cosa te gustaba mucho, estar en compañía y con tu familia cerca.

Tu rostro sereno nos consuela hoy, conscientes de tu vida llena de sonrisas, de las que todos hablan con ternura y cariño.

Gracias a todos aquellos que lo amaron, que le dedicaron tiempo o un pensamiento. Tenía a todos en mente, uno por uno.

Hola abuelo, ahora podrás volver a abrazar a la abuela, tu novia de la que tanto estabas enamorado.

Ofrecerás caramelos rojos o blancos a los ángeles y dibujarás nubes de humo blanco en el cielo, junto con la abuela. Protégenos desde arriba.

miércoles 15 mayo 2024

© TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS

PREV Riviera, vuelve la tarjeta de turista para viajar libremente en los autobuses TPL entre la costa y el interior
NEXT Etna Comics, 100 mil asistentes al Festival del Cómic de Catania