Llegó a Italia en 2009, tras la compra por parte del Udinese al Independiente Medellín, y ha pasado, desde su llegada a Udine, quince años en Italia, donde hasta ahora ha vestido la camiseta del Udinese, LecceFiorentina, Juventus y ahora Enterrar. Después de vivir en 5 ciudades diferentes, se convirtió oficialmente en ciudadano italiano, dando a conocer este logro personal a través de las redes sociales. De hecho, en Instagram publicó una fotografía suya al momento de obtener la ciudadanía donde expresó su satisfacción y agradecimiento: “Me he convertido oficialmente Italiano. Después de muchos años, 2009-2024, gracias Italia”
Estamos hablando de Juan Guillermo Cuadrado Bello, exfutbolista del Lecce pero ahora al final de su carrera. Él, colombiano de nacimiento, se enamoró del Bel Paese y ahora es ciudadano en todos los sentidos, con gran alegría y satisfacción por haber ostentado la tan ansiada ciudadanía.
Tu experiencia en Italia
Cuadrado llegó a Italia en 2009, cuando el Udinese lo fichó procedente del Independiente Medellín. Después de 2 años en la Juventus, el extremo fue cedido al Lecce, antes de pasar a la Fiorentina. Con la Viola el colombiano empezó a hacerse notar en las más altas esferas, tanto que llamó la atención del Chelsea, club en el que estuvo seis meses, ganando una Premier League y la Copa Carabao al que se mudó. Juventus, donde permaneció durante 8 años, acumulando 314 apariciones, 26 goles y 65 asistencias. Con los bianconeri ganó 5 campeonatos, 4 Copas de Italia y 2 Supercopas. Tras dejar la Juventus, Cuadrado pasó al Inter el año pasado. Con los nerazzurri, a pesar de muy pocas apariciones debido a muchos problemas físicos, ganó la Supercopa y ganó la Serie A.
Su experiencia con Lecce
Cuando vistió la camiseta del Lecce era muy joven, pero en Salento dejó un excelente recuerdo y dejó entrever las cualidades que luego lo distinguieron en su dilatada carrera. Cuadrado y Muriel, en aquella temporada con Di Francesco primero y Cosmi después en el banquillo, intentaron por todos los medios salvar al Lecce, regalando destellos de gran fútbol a la afición giallorossi, aunque el descenso era inevitable.