Una mirada al hombre y sus obras, en lo más profundo de los conflictos de los últimos 15 años, de las guerras pero también de los desastres vinculados a la crisis climática. Cincuenta obras, algunas inéditas, de Gabriele Micalizzi, un fotoperiodista milanés de 40 años. Una de las exposiciones más esperadas del Festival de Fotografía de Brescia.
Un viaje a la raíz de las contradicciones: milicianos rezando en el desolado paisaje de Derna (Libia) mientras llevan ayuda a las víctimas de las inundaciones. La desfiguración de los lugares y símbolos de las religiones de otros pueblos, desde Ucrania hasta Israel e Irak, contrastaba con la esperanza de los rostros fijados por la cámara en la película. Una reflexión sobre la inmanencia analógica en la convulsa era del smartphone, las redes sociales y la inteligencia generativa.
La culminación del arte de Micalizzi es el fresco fotográfico, diseñado para la sala del siglo XV junto a la Última Cena. Los planos se vuelven materia, incorporándose a la pared, signo de una historia cada vez más fluida y virtual. La obra será donada a la Fundación Brescia Musei. La exposición Legacy estará en el Museo Santa Giulia hasta el 1 de septiembre.
